Alerta en el Estrecho de Gibraltar por la llegada de pellets

Gibraltar intensifica la vigilancia costera tras el hallazgo de pellets en Tarifa. La Junta de Andalucía investiga su origen y posible conexión con el vertido del buque Toconao

Aparición de pellets en Tarifa / Fotografía: Verdemar
photo_camera Aparición de pellets en Tarifa / Fotografía: Verdemar

La tranquilidad de las costas del Estrecho de Gibraltar se ha visto alterada recientemente por la aparición de pequeños pero preocupantes contaminantes: los ya conocidos pellets de plástico. Este hallazgo en la playa de Bolonia, en Tarifa, ha desencadenado una serie de acciones por parte de las autoridades locales y regionales, en un esfuerzo por proteger el delicado ecosistema marino de la zona.

Aparición de pellets en Tarifa / Fotografía: Verdemar
Aparición de pellets en Tarifa / Fotografía: Verdemar

El Gobierno de Gibraltar, alertado por la situación, ha activado su Unidad de Investigación y Protección Medioambiental (EPRU). Esta medida busca intensificar la vigilancia en el litoral, en un intento por controlar y prevenir la propagación de estos contaminantes. Los pellets, pequeñas bolas de plástico de unos cuatro milímetros de diámetro, son comúnmente utilizados en la industria para la fabricación de diversos productos plásticos, como bolsas y envases. Sin embargo, su impacto ambiental es considerable, dado que no son biodegradables y su eliminación representa un desafío considerable.

El incidente podría estar vinculado al vertido del buque Toconao, ocurrido el 8 de diciembre de 2023. Durante este incidente, varios contenedores con 26 toneladas de estas pequeñas bolas de plástico cayeron al mar, afectando principalmente a la costa de Galicia Aunque aún no se ha confirmado si los pellets encontrados en Bolonia provienen de este vertido, las similitudes en el material han levantado sospechas. El Gobierno de Gibraltar ha expresado su preocupación, señalando que el material encontrado parece ser el mismo que el vertido por el Toconao.

La preocupación no se limita solo a la contaminación visual y física. Los microplásticos, como estos pellets, representan un riesgo significativo para la vida marina. Se acumulan en peces y moluscos, y existe el peligro de que sean ingeridos indirectamente por humanos, lo que podría tener consecuencias para la salud pública. Gibraltar ha emitido alertas sobre estos riesgos, subrayando la importancia de una respuesta rápida y efectiva.

Mientras tanto, en un esfuerzo por determinar el origen exacto de estos contaminantes, la Junta de Andalucía ha tomado la iniciativa de enviar muestras de los pellets recogidos en Bolonia para su análisis detallado. Paralelamente, los agentes de Medio Ambiente han aumentado la vigilancia en otras áreas del litoral de Cádiz, incluyendo localidades como Sanlúcar, Rota y Chipiona. Aunque hasta el momento no se han reportado hallazgos adicionales, la situación se mantiene bajo estrecha observación.