La cumbre con Marruecos, primera prueba de fuego para Sánchez en su agenda internacional 2023

La Presidencia de la UE en el segundo semestre dará al presidente una nueva oportunidad de exhibir su perfil internacional. 
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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tendrá en 2023 una cargada agenda internacional, que se intensificará en el segundo semestre con la Presidencia de turno de la UE, y cuya primera prueba de fuego será la cumbre con Marruecos prevista para las próximas semanas con la que se busca sellar la nueva etapa en la relación.

A raíz de su encuentro con el rey Mohamed VI el pasado 7 de abril en Rabat, ambos países acordaron la celebración de una Reunión de Alto Nivel (RAN) antes de que finalizara 2022, la primera desde 2015. La cita estaba prevista para diciembre de 2020, pero fue aplazada en principio por la pandemia pero luego la crisis diplomática a resultas de la acogida del líder del Polisario y la postura de España respecto al Sáhara la dejó postergada sine die.

Después de que Sánchez dijera por carta al monarca alauí el pasado marzo que España considera que el plan marroquí de autonomía para el Sáhara de 2007 es "la base más sólida, creíble y realista" para una solución al contencioso, los dos países han iniciado una nueva fase en la relación.

En una entrevista con Europa Press, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha ratificado que se mantienen los planes de que se celebre la última semana de enero o la primera de febrero y ambos gobiernos están trabajando para cerrar la fecha, ya que en ella participará una nutrida representación de ambos gobiernos.

Antes de ello, el ministro también ha confirmado que se producirá la esperada reapertura de la aduana de Melilla y la apertura de una nueva en Ceuta, donde antes no existía, de forma "ordenada y gradual". La idea, según indicó, es proceder como se hizo con el tránsito de personas, que se retomó por fases a partir de mediados de mayo.

Este es sin duda uno de los aspectos clave en esta nueva etapa, que ya fue anunciado por el propio Sánchez durante su visita a Rabat. Tras las dudas planteadas por Marruecos al respecto, finalmente su ministro de Exteriores, Naser Burita, ha ratificado públicamente el compromiso del reino con cumplir todos y cada uno de los puntos de la declaración conjunta.

PRESIDENCIA DE LA UE Y ELECCIONES

Las circunstancias han querido que España asuma la que será su quinta Presidencia de turno de la UE el 1 de julio, por lo que Sánchez encarará la recta final del año y llevará a cabo la campaña electoral como titular del Consejo.

Esta coincidencia no es algo anómalo y de hecho fue lo que ocurrió durante la Presidencia francesa en el primer semestre de 2022. El presidente francés, Emmanuel Macron, fue reelegido en abril estando al frente del Consejo en un momento especialmente delicado dado el estallido del conflicto en Ucrania por la invasión rusa.

Todo parece indicar que cuando España tome el relevo a Suecia, la guerra no habrá terminado o, de haberse logrado la paz, aún habrá que lidiar con sus consecuencias. Esta circunstancia dejará en Sánchez un papel destacado que desempeñar, toda vez que será encargado de encabezar las cumbres y convocar extraordinarias si fuera necesario.

Por lo pronto, el jefe del Ejecutivo tendrá que presidir los dos Consejos que se celebrarán en octubre y diciembre en Bruselas, así como uno extraordinario que el Gobierno ya ha adelantado que tendrá como escenario la ciudad de Granada.

Además, el Gobierno ya ha confirmado que está prevista una cumbre entre la UE y la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe (CELAC), cuyos líderes no se han reunido desde 2015, para el mes de julio en Bruselas, y también ha expresado su voluntad de que pueda haber otra cita a nivel de jefes de Estado y de Gobierno con los países de la Vecindad Sur --Argelia, Egipto, Israel, Jordania, Líbano, Libia, Marruecos, Palestina y Túnez-- que de producirse sería la primera.

Pero al margen del semestre europeo, Sánchez tiene ante sí otras citas importantes a nivel bilateral, en el marco de los contactos periódicos que el Gobierno mantiene con países con los que existe una relación particularmente estrecha. La primera de ellas será el 19 de enero con la cumbre con Francia en la que junto a Macron sellará el primer Tratado de Amistad entre los dos países.