El año pasado por estas fechas miles de ceutíes se preparaban para pasar unos días festivos fuera de la ciudad. El puente de la constitución lo suelen aprovechar los ceutíes para realizar los últimos viajes del año y realizar las compras navideñas.
En condiciones normales los barcos del mediodía ya habrían colgado el cartel de completo. Hoy solo saldrán de la ciudad las personas que porten un justificante que les permita viajar.
El Gobierno local se ha comprometido a controlar las salidas para evitar que personas que no tengan que pasar a la Península lo hagan, como está ocurriendo. Algunos ciudadanos se hacen con justificantes de médico falsos para cruzar el Estrecho.
Pero no hay mal que por bien no venga, la prohibición de salir de Ceuta va a permitir que estas miles de personas consuman en la ciudad y gasten el dinero en los negocios locales. El comercio y la hostelería no pierden la esperanza y esperan que estos cuatros días de fiesta les sirva para compensar las grandes pérdidas que llevan acumuladas desde que comenzara esta crisis sanitaria.
El presidente de la Cámara de Comercio, Karim Bulaix, anima a los negocios a que abran estos días de fiesta.
