PROTESTA EN EL CENTRO DE SALUD DEL RECINTO

Los enfermeros alertan de los perjuicios que sufrirán los servicios cuando se les impida prescribir medicinas

Los miembros de la junta de personal del Ingesa se han concentrado esta mañana ante el centro de salud de El Recinto para denunciar las consecuencias que sobre la calidad de los servicios sanitarios tendrá la entrada en vigor del real decreto que prohíbe a los enfermeros prescribir medicamentos. El sindicato Satse denuncia que el Gobierno demora la aplicación de la norma para evitar en periodo electoral el reproche social que ello le reportaría. 

concentración enfermería el tarajal
photo_camera Trabajadores y usuarios, esta mañana ante las puertas del centro de salud de El Recinto/ C.A.

Los profesionales de enfermería viven sumidos en la incertidumbre. La inminente aplicación del real decreto que les priva de su competencia para prescribir medicamentos ha puesto en pie de guerra a los miembros de la junta de personal del Instituto de Gestión Sanitaria (Ingesa), quienes esta mañana han inaugurado sus protestas con una concentración en el centro de salud de El Recinto.

Los sindicatos alertan de la situación que abrirá la entrada en vigor de la norma en el día a día de los servicios públicos de salud. La imposibilidad legal de que los enfermeros puedan prescribir medicamentos, establecida por el real decreto, se plasmará, según los representantes de los trabajadores, en la congestión de las consultas asistenciales domiciliarias y de los centros de salud, así como en el trabajo cotidiano del Hospital Universitario. “El nuevo articulado del decreto deja a los enfermeros para echar agua bendita –ha ironizado la secretaria general de Satse, Elisabet Muñoz- Los médicos tiene consultas masificadas y, a partir de ahora, deberían asumir también las curas de enfermería, la administración de vacunas, insulinas, antidiabéticos orales…”.

La portavoz del Satse ha denunciado que el Gobierno central estaría demorando la entrada en vigor de la norma para evitar el reproche social que, asegura, traerían consigo las consecuencias prácticas de la aplicación de la nueva norma. “Lo hacen justo ahora cuando se acercan las elecciones –continúa Muñoz- Tenemos fuentes que apuntan a que la intención es la de publicarlo en BOE el día 21, lo cual sería vergonzoso”.

La entrada en vigor del real decreto afectará a unos 450 profesionales que desempeñan su labor en la sanidad pública y en la empresa privada.

Los enfermeros volverán a concentrarse mañana y pasado ante las puertas de los centros de salud de Otero y El Tarajal.