En rueda de prensa, Gallardo ha anunciado que ha decidido poner 6.000 euros de su patrimonio para pagar los billetes del helicóptero a las personas que no dispongan de recursos y que están obligadas a trasladarse hasta Algeciras para recibir el tratamiento de radioterapia, ya que en el barco, sobre todo los días de mala climatología y temporal, el sufrimiento que padece el enfermo es “inhumano”.
La iniciativa llega después de que Gallardo haya tenido que hacer frente a una dolencia oncológica en el seno de su familia, lo que le ha llevado a descubrir en primera persona el alcance y el sufrimiento que supone la enfermedad del cáncer.
Mientras la el Ingesa y la Ciudad trabajan para la firma de un convenio para el transporte aéreo de estos enfermos. Gallardo ha precisado que la burocracia es muy lenta y que en la actualidad, según le informaron en el Ingesa, el servicio sanitario sólo abona a los pacientes una parte del billete del barco. Los enfermos tienen que abonarlos por anticipado y luego dirigirse al Ingesa para que le devuelvan el importe de la parte que está sometida a subvención. Pese a ello, Gallardo precisión que el director territorial, Fernando Pérez Padilla, le había dicho que eso no era así.
Con su iniciativa, para la que pretende reunirse con los responsables de la compañía Hélity al objeto de lograr un acuerdo para la aplicación de una tarifa plana, Gallardo pretende que los enfermos reciban el billete antes de realizar el viaje y no tengan que pagar nada.
Se programarían con Algeciras los días que los enfermos tienen que recibir tratamientos y se procedería al traslado en helicóptero hasta Algeciras, en cuyo helipuerto serían recogidos y conducidos hasta el centro en el que reciben el tratamiento.
La aportación, aunque es de su patrimonio, quedará canalizada a través de la Fundación Gallardo, por lo que en estos momentos se estudia el sistema de gestión para llevarla a cabo.
El empresario espera que la su idea pueda ser una realidad en el mes de julio y estima, según cálculos aproximados, podría servir para sostener el servicio durante unos cuatro meses. Gallardo, que ha hecho un llamamiento al resto de empresarios de la ciudad para que sumen a la idea, espera que en ese tiempo el Ingesa y la Ciudad hayan alcanzado un acuerdo para suscribir el convenio para la subvención del transporte aéreo de los enfermos.
Por otro lado y aunque como opinión personal, el empresario entiende que en la ciudad no debería construirse una clínica de radioterapia, ya que este servicio debería instalarse en las dependencias del Hospital Universitario.
