Un terremoto similar al simulado en el ejercicio “Sur 2016” dañaría las dos terceras partes del parque de viviendas en los territorios afectados y causaría pérdidas por valor de unos 1.000 millones de euros, según las estimaciones del buscador inmobiliario Nestoria.
A modo de ejemplo, el buscador cita el derrumbe de un edificio en la localidad sevillana de La Algaba, incluido dentro de la programación del simulacro. El colapso de un inmueble ubicado en este municipio, donde el precio del metro cuadrado asciende a 980 euros, que tuviese una superficie de 3.000 metros supondría por sí solo un coste económico de 2,9 millones de euros.
“Además, a ello habría que sumarle el gran impacto que un suceso de este tipo tiene en el parque de viviendas de una ciudad, ya que, aunque no haya grandes derrumbes, muchas de las casas o edificios sufren desperfectos de diferente consideración”, explican los autores de la estimación.
Cada año se registran entre 1.200 y 1.400 terremotos en la Península Ibérica, aunque seísmos de 6,5 grados en la escala de Richter o más, como el que reproduce el simulacro, resulta infrecuente.
