Comerciantes radicados en la Gran Vía, Paseo del Revellín y calle Real han trasladado a la directiva del Centro Comercial Abierto (CCA) su preocupación por los altercados que un grupo de menores provoca a diario en sus establecimientos. Según denuncian los empresarios, los jóvenes acceden sin contemplaciones a las tiendas en cuyo interior se mueven con la intención de robar los artículos expuestos.
La situación ha obligado a los comerciantes a aleccionar a sus empleados para que vigilen a los menores, quienes mantienen una actitud retadora cuando se les recrimina su actitud. “Ha habido casos incluso en que han llegado anunciando que venían a robar”, denuncia un empresario.
Los afectados mantendrán este lunes un encuentro con la dirección del CCA. Los representantes de los comerciantes expondrán sus quejas a la Ciudad, a la que reclamarán la adopción de medidas.