El juez condena a pagar 300 euros al policía local que golpeó a una mujer que celebraba una victoria deportiva

El incidente se registró el pasado diciembre cuando un grupo de personas celebraba que Marruecos acababa de ganar un partido del Mundial. El juez también impone una multa a la mujer que recibió el golpe y a otra que le acompañaba por un delito leve de maltrato de obra.

Captura de una grabación del incidente UIR Marruecos Portugal Policía Local
photo_camera Captura de una grabación del incidente

El juez ya se ha pronunciado sobre los incidentes registrados tras el partido del Mundial de fútbol entre Marruecos y Portugal el pasado 10 de diciembre. El titular del Juzgado de Instrucción número 5 ha condenado al pago de una multa de 300 euros a un subinspector de la Unidad de Intervención Rápida (UIR) de la Policía Local por un delito de lesiones perpetrado al golpear con su defensa reglamentaria a una mujer que celebraba la victoria de la selección marroquí junto a otras personas en el centro de la ciudad. El juez ha considerado la falta de proporción de la actuación del agente y la imposibilidad de justificar su acción en la legítima defensa.

La del agente no ha sido, sin embargo, la única condena. El juez impone también a la mujer agredida y a otra que se encontraba con ella en el momento del incidente una multa de 180 euros por un delito leve de maltrato de obra. La infracción se habría cometido cuando las mujeres trataban de dificultar que los agentes identificaran a un hombre que grababa los hechos con un móvil.

La resolución judicial considera probado que los incidentes arrancaron cuando los agentes requisaron un tambor a una de las personas que en la tarde del 10 de enero celebraban en la Plaza de la Constitución la victoria de la selección de Marruecos en un partido de fútbol del Mundial. A juicio del juez, los agentes contuvieron con proporcionalidad la reacción de un grupo de personas que les recriminó su comportamiento, pero subraya que uno de ellos se extralimitó cuando fue recriminado por una mujer que había recibido un golpe. Como respuesta, le propinó tres porrazos con su defensa reglamentaria.

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