Ceuta será escenario de un simulacro de emergencia por terremoto del 18 al 22 de septiembre. La Unidad Militar de Emergencias (UME) organiza este ejercicio para evaluar la coordinación y la eficiencia de los equipos de intervención ante una situación de nivel 2. En el simulacro participarán los medios de la Ciudad, la Delegación de Gobierno, la Comandancia General y la UME.
El Puesto de Mando Avanzado (PMA) se instalará en la ciudad y desde allà se dirigirá la respuesta a las múltiples incidencias provocadas por el seÃsmo. El PMA integrará a los servicios de emergencias de las distintas administraciones e instituciones implicadas.
Las actividades previstas para el simulacro abarcan el mando y control de la emergencia desde el PMA, la gestión de la crisis desde el puerto, los rescates en altura, los reconocimientos subacuáticos de infraestructuras, las labores de búsqueda y rescate en espacios confinados y en superficie acuática y la utilización de perros adiestrados para localizar a las vÃctimas.
¿Qué es un simulacro de emergencia?
Un simulacro de emergencia es una actividad que se realiza para ensayar y evaluar la capacidad de respuesta ante una situación de peligro o desastre que requiere una acción inmediata. Los simulacros de emergencia tienen como objetivos principales:
- Verificar la efectividad de los procedimientos de actuación establecidos en el plan de emergencia de una organización o instalación.
- Comprobar el funcionamiento y el mantenimiento de los medios y recursos disponibles para afrontar la emergencia, tanto humanos como materiales.
- Capacitar y entrenar al personal encargado de poner en práctica las medidas de autoprotección, primeros auxilios, lucha contra incendios y evacuación.
- Detectar y corregir posibles fallos, deficiencias o áreas de mejora en el plan de emergencia.
- Sensibilizar y concienciar a los trabajadores, usuarios y visitantes sobre la importancia de la prevención y la autoprotección.
Los simulacros de emergencia se basan en la simulación o imitación de unas posibles situaciones de riesgo, como por ejemplo un incendio, un terremoto, una inundación, un atentado, etc. Estas situaciones se plantean como escenarios hipotéticos que ponen a prueba la actuación de los equipos de intervención y la coordinación entre ellos y con otros servicios externos, como bomberos, policÃa, protección civil, etc.
Los simulacros de emergencia se deben planificar con antelación, teniendo en cuenta el tipo y la magnitud de la emergencia que se quiere simular, los objetivos que se persiguen, los participantes que intervienen, el lugar y el momento en que se realiza, los medios y recursos que se emplean, etc. También se debe informar a las autoridades competentes y a las personas afectadas por el simulacro, para evitar confusiones o alarmas innecesarias.
Los simulacros de emergencia se deben realizar periódicamente, según lo establecido en el plan de emergencia o en la normativa aplicable. Después de cada simulacro se debe hacer una evaluación del mismo, analizando los datos recogidos, las incidencias ocurridas, las opiniones y sugerencias de los participantes, etc. Asà se podrá obtener un informe con las conclusiones y las recomendaciones para mejorar el plan de emergencia y la preparación ante posibles situaciones reales.
