Mientras realizaban una compleja posición de yoga, Alec decidió proponerle matrimonio a su novia. Sacó de abajo de su cabeza una cajita con el anillo de compromiso en el momento que su novia se encontraba encima de sus piernas.
Cuando descubrió el anillo, Steph estaba de cabeza balanceándose encima de los pies de Alec, y no pudo evitar llenarse de emoción y aceptar de inmediato con un dulce beso.