Lo cierto es que Ceuta está atravesando una época difícil ya que, a las dificultades de ámbito nacional, se unen una serie de circunstancias internas, externas e incluso de carácter internacional sobre las que no se adoptan decisiones concretas, salvo concesión de subvenciones.
Para tratar de todo esto, el pasado jueves se reunió en el Parador La Muralla el Comité asesor Interior de la Fundación Interservicios Ceuta y algunos invitados, todas personas con profundo conocimiento de la realidad local. Anteriormente, ya se había convocado en Madrid al Comité asesor exterior de dicha entidad que valoró la especial situación de Ceuta desde la óptica peninsular e incluso europea, por la diversidad de los participantes.
Las diferentes profesiones reunidas en el Comité asesor de Ceuta e invitados, garantizaban la realización de un análisis profundo y sereno, ya que participaron desde abogados a empresarios, economistas, expertos en actividades portuarias no solo en lo que abastecimiento de buques se refiere, sino al funcionamiento de puertos como el de Ceuta, Gibraltar, Algeciras o Tangermed. Incluso asistieron, profesores, informático, licenciada en medicina, notario y jóvenes para conocer la opinión de esta parte tan esencial en la sociedad ceutí, aparte de los miembros del Patronato de la Fundación.
Dicha Fundación Interservicios Ceuta se inscribió en julio de 2019 y tiene entre sus fines “El estudio, desarrollo y relanzamiento del régimen económico, fiscal y social de la Ciudad de Ceuta; la promoción y defensa de la imagen de Ceuta, así como su modernización y progreso; y el fomento de la buena vecindad entre Ceuta y las ciudades o territorios adyacentes”. Y para llevar a cabo tan ambiciosos y necesarios objetivos dispone de un Comité Asesor en la propia ciudad y otro en el exterior, todo lo cual figura junto a otros importantes datos en la página web de la citada entidad sin ánimo de lucro (www.fundacioniceuta.org).
Ceuta fue naturalmente el tema de debate e intercambio de opiniones, haciéndose especial hincapié en la difícil situación que atraviesa la ciudad, sobre todo desde la avalancha de inmigrantes del pasado mes de mayo que fue propiciada por Marruecos, como un escalón más de su estrategia para arruinar económicamente a Ceuta, lo que trataría de apoyar su histórica reivindicación de la ciudad.
En dicho contexto se analizaron los distintos temas que preocupan en este momento a los ciudadanos como el cierre sine die de la frontera, los polígonos comerciales sin utilizar en estos momentos, el puerto afectado también por la eliminación de la Operación Paso del Estrecho, el comercio tradicional muy perjudicado y generando cierres de establecimientos, subida de los niveles de paro real, inmigrantes sin controlar con estadísticas cambiantes, supresión del trabajo transfronterizo que proporcionaba mano de obra en algunos sectores y, desde luego sin decisiones concretas sobre el asunto Schengen e Unión Aduanera, junto a otros problemas. Incluso, hubo coincidencia en mostrar preocupación por los continuos atentados a la seguridad local, como la reiterada quema de contenedores y vehículos, agresiones y otras circunstancias que parecen no han sido resueltas hasta ahora. Pero lo que supone también una peligrosa incógnita es la escalada de acciones marroquíes, sin que se adopte una estrategia al respecto que aporte tranquilidad a los ciudadanos y prestigio internacional a España.
Así se comentaron las últimas noticias como la instalación junto a Melilla de una piscifactoría en las aguas de Islas Chafarinas pertenecientes a España, algún incidente junto al puerto de la mencionada ciudad de Melilla y otras de tipo económico, como la instalación de un outlet entre Mdiq y Tetuán.
Las intervenciones de los asistentes fueron tan numerosas como interesantes y se comentó el abandono en que la Unión Europea tiene a Ceuta en lo político, salvo inversiones no productivas, buenas palabras y quizás con base en la carencia de una representación de nuestra ciudad en Bruselas que ponga de manifiesto la situación real. Incluso se trató la falta de arraigo producido en parte por no ofrecer residencia estable y no temporal a funcionarios.
Con base en todo lo expuesto en la reunión, se abordó cual podría ser el futuro de Ceuta y hubo coincidencia en que los residentes en la ciudad y fuera de ella, deben seguir trabajando para conseguir que los políticos actúen con realismo e independencia al objeto de afrontar todos los retos citados. Para ello, es preciso establecer estrategias respecto a las relaciones con Marruecos, al puerto y a la economía de la ciudad que le permita a esta vivir de forma independiente y con medios, lo que exigirá la atención de España, pero también de la Unión Europea. Y se hizo hincapié en la necesidad de conseguir el cambio de modelo económico que debe fomentar la iniciativa privada para atraer empresas y que la Ciudad Autónoma no intervenga en actividades empresariales, deje de ser un territorio subvencionado y se establezcan estadísticas que permitan saber lo que ahora son cifras misteriosas.
Por último y al igual que en Madrid, se acordó igualmente que cada uno de los miembros del Comité e invitados elaboren un trabajo titulado Ceuta vista desde el exterior, para tener una visión exacta de como se ve desde el resto de España a la Ciudad Autónoma porque, una vez editado, seguro que será una sorpresa y habrá que actuar en consecuencia.
Y lo que quedó claro es que los ciudadanos de Ceuta desean volver cuanto antes a la política de buena vecindad con Marruecos para que las relaciones fronterizas sean fluidas y de carácter positivo y apolítico.
Un encuentro amistoso que se prolongó durante varias horas, donde privó la libertad de opinión, un trato cordial y que desde luego fue muy fructífero respecto a los fines de la Fundación Interservicios Ceuta.
