El Ministerio de Defensa ha conmemorado este martes conmemoró el pasado 21 de marzo el 35 aniversario de la incorporación de la mujer a las Fuerzas Armadas. Un acto para recordar a "las pioneras", las 27 primeras mujeres en unirse a las diferentes academias militares del país en 1988, pero también para celebrar todas las barreras y obstáculos derribados desde entonces y que han ido abriendo la puerta a las casi 16.000 mujeres que hoy en día forman parte de los Ejércitos.
El evento contó con la participación de varias mujeres de las Fuerzas Armadas que explicaron su experiencia en el Ejército. Entre ellas, como ponente, estuvo la teniente Amadora Mercado, Directora de la Unidad de Música del Batallón de Cuartel General de la COMGECEU que participó en el I Encuentro de Mujeres con Trayectorias Destacadas en las Fuerzas Armadas.
Han pasado ya 35 años desde que se incorporasen las primeras mujeres a las Fuerzas Armadas, pero aun así hoy en día solo representan el 13% del personal, según datos de 2022. Diez años atrás, el porcentaje era apenas un punto menor, lo que refleja el lento avance en ese sentido. La mayoría (36,3%) están integradas en cuerpos comunes; y el resto en el Ejército del Aire y del Espacio (14,2%); en la Armada (13,8%) y en el Ejército de Tierra (11,5%). En cualquier caso, el porcentaje español es superior al de la media de países de la OTAN (12%); y está muy por encima de otros como Turquía (0,3%) o Polonia (7%); aunque lejos del 20% de Hungría.
Según ha incidido la representante especial del secretario general de la OTAN para Mujeres, Paz y Seguridad, Irene Fellin, hay que tener en cuenta que la media de representación femenina en el Ejército de los países que integran la organización ha pasado, en veinte años, del 6 al 12%.
En España, desde 1988, todo han sido hitos. El último ha sido la eliminación del requisito de estatura en el acceso a diferentes cuerpos y escalas, este mismo año, pero antes de este se alcanzaron muchos otros que fueron allanando el camino a las que vinieron después.
En 1989, por ejemplo se permitió el acceso de la mujer a la categoría de tropa y marinería profesional; en 1993 participaron por primera vez soldados españolas en operaciones en el exterior; en 1999 se eliminaron las limitaciones en el acceso en Tropa y Marinería; y en 2005 se creó el primer Observatorio de la mujer en las Fuerzas Armadas.
Pero no fue hasta julio de 2019 cuando alcanzó el generalato la primera mujer: Patricia Ortega, hoy general de División y asesora de la Secretaría de Estado de Defensa; a la que le seguiría, dos años después, Begoña Aramendía, militar jurídica, que en 2021 se convirtió en la segunda mujer general.
