Una orden judicial ha enviado a prisión a C.G.C., un hombre de 56 años aquejado de síntomas de neumonía que había intentado eludir la obligación de mantenerse aislado en su domicilio. El individuo había sido atendido durante el día de ayer en el Hospital Universitario, donde fue sometido a la prueba del coronavirus, que arrojó resultado negativo, después de lo cual abandonó el centro.
El facultativo informó a la Policía Nacional de que el hombre, dado su estado de salud y su resistencia a cumplir con la obligación de permanecer confinado, podría convertirse, en caso de contraer la enfermedad, en un vector de contagio.
A mediodía, los agentes encontraron al hombre en las inmediaciones del centro hospitalario y, tras informarle de sus obligaciones, le condujeron a su domicilio.
Tras informar al juzgado de guardia, los policías recibieron la encomienda de verificar que si el hombre se encontraba o no en su vivienda observando el aislamiento. Apenas dos horas después de haberle acompañado a su casa, los policías encontraron al hombre deambulando por la calle Millán Astray, momento en que se produjo su detención como presunto autor de los delitos de desobediencia y contra la salud pública.
