La medida estrella adoptada por el Gobierno central para contener los precios de la cesta de la compra resulta ineficaz en Ceuta. El Real Decreto del 27 de diciembre establece la aplicación desde el 1 de enero pasado del 0% del IVA a un grupo de alimentos básicos a los que hasta ahora se les repercutía el 4%. Entre estos se encuentra el pan, las harinas panificables, distintos tipos de leche, quesos, huevos y frutas y verduras. Además, se contempla una bajada del 10 al 5% del IVA a los aceites de oliva y de semillas y a las pastas alimenticias.
El Impuesto sobre la Producción, los Servicios y la Importación (IPSI), que rige en Ceuta en sustitución del IVA, está regulado por una ley de 1991 concebida para establecer un tratamiento fiscal distinto para las dos ciudades autónomas respecto al resto de España. Esa ley no permite emular la medida de reducción de impuestos indirectos que rige desde principios de año en el territorio peninsular porque establece un tipo mínimo de obligada aplicación a esos productos del 0,5%. La modificación de la ley escapa a la competencia de la Ciudad.
Aunque al 0,5% tributan buena parte de los productos beneficiados por la rebaja del IVA aprobada por el Gobierno central, la exigencia de la oposición de tomar medidas que permitan combatir la inflación ha puesto sobre la mesa la necesidad de aplicar algún de instrumento para moderar la subida del precio de los alimentos.
El caso es que en Ceuta los precios de los alimentos continúan con su tendencia alcista. Si el dato definitivo del IPC para octubre fue del 15,5%, el correspondiente a noviembre se elevó hasta el 15,9%. La tasa anual para el conjunto del país se situó en el 15,3%, una décima inferior a la registrada en octubre.
El pleno de la Asamblea aprobó el pasado octubre una medida presentada por el grupo de Ceuta Ya! para la aplicación de un programa de subvenciones al transporte de alimentos que permita la congelación de los precios de la cesta de la compra. La iniciativa emergía, tras el anuncio del Gobierno central, como una suerte de alternativa a la reducción del IVA de los alimentos básicos. Además, al contrario de lo que sucede con la rebaja del IVA, este paquete de subvenciones sí que afectaría a los precios de la carne y el pescado.
Sin embargo, la medida, pese a estar aprobada, no se ha hecho efectiva.
