La retirada del último buque que transportaba mercancías peligrosas y residuos de origen animal a la Ciudad Autónoma de Ceuta ha provocado una situación "crítica" que afecta a diversos sectores económicos y sociales. La Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE) alerta, en una nota de prensa, de los graves perjuicios que está causando la falta de transporte para estas mercancías, que están clasificadas en nueve categorías según su peligrosidad. Entre ellas se encuentran explosivos, gases, líquidos y sólidos inflamables, materias comburentes, tóxicas, infecciosas, radioactivas, corrosivas y otros objetos diversos como amianto, pilas de litio o maletines de primeros auxilios.
Estos productos no solo son necesarios para los servicios públicos, sino también para muchas empresas y actividades que los ciudadanos consumen habitualmente. Por ejemplo, el CO2 se usa para presurizar barriles de cerveza en la hostelería y el oxígeno medicinal se emplea en los hospitales.
La Confederación de Empresarios denuncia que muchas empresas están teniendo "problemas" para traer estas mercancías y que, si no se soluciona esta situación, tendrán que "variar los contratos con sus proveedores" y enviar la mercancía a Málaga en vez de a Algeciras, lo que supondría un incremento en los costes de transporte y aprovisionamiento. Además, señala la CECE esta solución temporal no garantizaría la regularidad del servicio.
La Confederación de Empresarios considera que el transporte de mercancías peligrosas es una necesidad básica para Ceuta y que la administración debe garantizar una línea de abastecimiento para estas mercancías, al margen de las negociaciones temporales que cada operador está realizando. De lo contrario, advierte que esta situación podría convertirse en un verdadero problema para todos los habitantes.
