La limpieza ha vuelto a enredar al Gobierno y Caballas en un eterno debate. En esta ocasión la coalición ha llevado a pleno una moción de urgencia con la que ha pedido al Ejecutivo la elaboración de un expediente informativo sobre cómo funciona la empresa concesionaria del servicio de limpieza y recogida de basura y poder sacar las conclusiones pertinentes sobre la calidad del mismo.
El número 2 de Caballas, Juan Luis Arostegui, ha afeado al Gobierno que el aumento de presupuesto del contrato en un millón y medio de euros "no va a servir para nada porque la ciudad está sucia, muy sucia". Además para los localistas el hecho de que no existan controladores los viernes por la tarde y fines de semana pone de manifiesto el "poco" control que el Gobierno hace del cumplimiento del pliego de condiciones. Tampoco entienden cómo "a una continua reducción de plantilla puede seguir una aumento de inversión". Por todo eso, Caballas solicita un expediente informativo que resuelva todas las dudas "porque el Gobierno no da explicaciones. No sabemos si porque no sabe o porque no quiere contestar", concluía en su primera intervención Aróstegui.
El responsable de Medio Ambiente, Emilio Carreira, ha respondido punto por punto las dudas de Caballas asegurando que la empresa Trace aboga por menos trabajadores y más maquinaria al tiempo que ha afirmado que hay una confusión general sobre las competencias que tiene la concesionaria. Pero que aún así "ahora habrá una incorporación masiva de trabajadores después de las vacaciones". Carreira ha sido confuso en este punto cuando minutos después ha asegurado que "no tiene sentido que en invierno, cuando llueve y se necesita baldear menos, haya el doble de operarios que en verano". Caballas no se ha creído estas explicaciones en tanto en cuanto "según el pliego la empresa está obligada a sustituir a todos los trabajadores durante sus vacaciones", ha explicado Aróstegui apuntado a un beneficio adicional de la empresa al no mantener el número de empleados pero sí aceptar el aumento de presupuesto.
Los balones de Carreira han ido a parar directamente al tejado de Trace al aseverar que a la concesionaria "le falta especialización en la dirección" y que por eso, está apremiando "para que haya un cambio de accionariado".
Las culpas de Carreira no se han quedado en la concesionaria. La Policía Local ha recibido lo suyo cuando el consejero ha explicado que "no quiere tanta foto de la suciedad en las calles sino a los responsables". Carreira ha terminado asegurando que cuando sepan qué hacer con el servicio se convocará una comisión informativa.
Las alusiones al estado en el que estaba la cuidad con Urbaser han sido continuas e incluso se ha viajado hasta el año 89 en un debate ya más dialéctico que práctico entre Carreira y Aróstegui.
El único partido que ha intervenido en este punto ha sido el MDyC. Su portavoz, Fátima Hamed, ha acusado al Gobierno de favorecer a sus amigos "deluxe hasta convertir el servicio de limpieza en el servicio de la vergüenza". Palabras que han tenido su respuesta en boca del presidente de la ciudad, Juan Vivas, quien ha asegurado que el cupo de insultos por parte del MDyC hacia el PP estaba cubierto por hoy, tras llamarles fascista en otra moción presentada.
La moción ha sido rechazada con los votos del PP, las abstenciones de Ciudadanos y MDyC y los votos a favor los proponentes y los socialistas.
