Mariano Catarecha Garcés, deportista con una ejemplar trayectoria y pionero en Ceuta en competiciones de fitness y fisioculturismo, representando a su ciudad en campeonatos del máximo nivel.
Esta es la carta de presentación de uno de los galardonados con la Medalla de la Autonomía. Un reconocimiento que se concede tras las propuestas de los grupo parlamentarios de la Asamblea de la Ciudad y que han de ser ratificadas en sesión plenaria.
La Asamblea acordó conceder la Medalla de la Autonomía a las cuatro comunidades de Ceuta, al sindicalista Eloy Verdugo, al deportista Mariano Catarecha y al profesor Ahmed Abdel-Lah así como la AD Ceuta, la única propuesta que recibió el voto favorable de los todos grupos. Catarecha recibirá este sábado la distinción tras ser propuesto por el grupo parlamentario VOX.
Para un deportista que se ha subido al podio en innumerables ocasiones, acostumbrado a ver colgar en su pecho medallas podría parecer que un premio más no le llenaría de emoción, pero nada más lejos de la realidad. Para Mariano Catarecha, recibir este galardón supone «un grandísimo orgullo, ya que jamás pensé que me lo darían, ni lo había imaginado nunca», por una razón de un peso incuestionable. «Amo a Ceuta y para mí es uno de los mejores premios que uno puede recibir», confiesa este hombre que ha consagrado su vida a la práctica deportiva y a su familia y no necesariamente por este orden.
Fiel a los códigos que marca el deporte, Catarecha no se deja en el tintero plasmar su gratitud hacia aquellos que han hecho posible que este sábado pueda recibir una de las mayores distinciones que concede la Ciudad. «Agradezco, desde aquí, a todas las personas que me han votado».
Mariano lleva en un ADN el deporte. Baloncesto, fútbol de la ciudad, Kickboxing y Muay Thai para acabar finalmente entregado al mundo del fitness y el fisioculturismo, no sólo como competidor, también como entrenador, por lo que este reconocimiento significa un respaldo a su trayectoria deportiva y profesional. «Es un chute de motivación increíble» señala y añade que esta distinción es un punto de inflexión en su vida. «Ahora siento aún más la responsabilidad de representar a Ceuta e intentar llegar lo más lejos posible tanto en el mundo deportivo como en el empresarial».
Pero el mundo de Catarecha no sólo se centra en el deporte. Su familia es su motor y y han recibido este premio con la misma o mayor ilusión que el propio Mariano que se vio superado por la emoción cuando le notificaron que iba a recibir este premio. «Me pilló por sorpresa. Iba conduciendo y creí que era una broma. Me quedé en shock. Iba con mi mujer en el coche y hasta me regañó porque sabía que para mí era lo más grande, pero contesté muy seco porque como he dicho me quedé bloqueado». Tras superar la impresión del momento envió un mensaje de agradecimiento «y ya no cabía en mí. Muy orgulloso». Sus hijos se pusieron muy contentos porque saben «el amor que le tengo mi ciudad y saben lo importante que es para mí», concluye Catarecha, un gran embajador de Ceuta.
