“Sí, ha sido un error, pero ya lo estamos solucionando”. La consejera de Asuntos Sociales, Dunia Mohamed, intentaba zanjar así la gestión realizada por su Consejería en una de la casa de acogida para víctimas de violencia de género y que desde marzo de 2020 se encuentra habitada por una familia. “Nos encontrábamos en plena pandemia y esta familia vivía en la calle”, se excusaba la consejera ante la interpelación planteada por el MDyC que quería conocer las medidas a adoptar para que vuelvan a aplicarse los recursos asignados para luchar contra la violencia de género.
Mientras Fatima Hamed tildaba de “alarmante y escandaloso que se tomase la decisión de darle otro uso a un recurso público”. Mohamed, le restaba importante y adelantaba que se ha iniciado el expediente administrativo para proceder a la desocupación.
Un argumento que la portavoz del MDyC tachaba de “mentira”, y le afeaba, a través de un expediente de los técnicos de la Consejería, que la ocupación de dicho recurso después de más de un año ha perjudicado a muchas víctimas de violencia de género, a las que se está trasladando a hostales, “con la inseguridad que ello conlleva”. Asimismo, Hamed le ha espetado que el 17 de noviembre se pidió la continuidad del servicio pese a contar con el informe negativo de la Intervención de la Ciudad.
