Primer aniversario de la mayor crisis migratoria: un antes y un después para la ciudad autónoma

Un año del 17M: el día que los ceutíes "contuvieron la respiración"

A día de hoy, casi la totalidad de los adultos y el 90% de los menores ya no están en Ceuta, según el Gobierno de la Ciudad.  
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photo_camera Entrada migrantes hace un año (ARCHIVO)

Hoy se cumple un año de una fecha negra para la ciudad. El 17 de mayo de 2021 más de 12.000 marroquíes entraron irregularmente y de forma masiva nadando y bordeando el espigón del Tarajal. Los agentes marroquíes no hicieron nada para impedirlo. En la retina de los ceutíes quedan imágenes de la playa del Tarajal abarrotada de migrantes, la impresión que supuso la presencia del Ejército en la frontera o la ayuda humanitaria prestada por agentes y personal voluntario. Las imágenes de lo que muchos llamaron "invasión" dieron la vuelta al mundo y Ceuta se colocó en la portada de los medios de comunicación nacionales e internacionales, por delante de la pandemia. Las cifras oficiales nunca se han contabilizado o dado a conocer. El presidente de la Ciudad reconoció que jamás había visto "nada igual" y que "Ceuta contuvo la respiración". 

Fue una de las crisis que sufrió y aún sufre una Ceuta que ni mucho menos se mereció el acontecimiento, espectacular donde los haya. También un fue un antes y un después para los ceutíes, primero temerosos por lo que podía suceder y luego calmados y más seguros por el apoyo de las instituciones estatales y locales. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, viajó a la ciudad el mismo 17 para dar tranquilidad a la población. Las entradas continuaron aunque en menor medida el 18 de mayo. Entre los llegados a la ciudad, más de mil menores. A día de hoy, según el Gobierno de la Ciudad, ya se han ido o fueron devueltos la mayoría de los adultos y ya no está el 90% de los menores de edad. 

El episodio tambaleó Ceuta. Eso es indiscutible. Las calles estaban siendo ocupadas por cientos de marroquíes y cientos de asentamientos que, poco a poco, se han ido desmantelando. Lo ocurrido en mayo de 2021 empeoró las relaciones con Marruecos. Un año después no solo se ha abierto la frontera del Tarajal sino que España y el país vecino van a colaborar juntos en asuntos vitales para ambos pueblos, reiniciando las visitas y reuniones y mirando al futuro. La visita reciente del presidente Sánchez a Rabat se puede calificar de histórica. 

Al margen de contactos, reuniones, visitas como la del ministro del Interior, refuerzos llegados de la península y otras decisiones adoptadas por los gobiernos, quizá una de las cuestiones más relevantes fue la unidad mostrada por todos los grupos políticos con representación en la Asamblea y la manera en que Europa intervino en defensa de la ciudad. Ceuta posteriormente ha recibido y recibe cuantiosos recursos económicos por parte de España y la Unión que han sido utilizados y gestionados por la Ciudad Autónoma para afrontar la crisis. Y es que Ceuta es la puerta y frontera sur de la Unión Europea. Esto es algo que nadie ni debe ni tiene que olvidar. 

El pueblo fue reconocido por su comportamiento, por soportar la sobrepoblación. Este 17 de mayo de 2022, de aquel episodio negro quedan en la ciudad unos 300 niños y unos 30 adultos. 

Todos los organismos implicados en el rescate de personas y defensa de la ciudadanía actuaron con eficacia. Este martes se puede afirmar que la situación está prácticamente normalizada, con los acuerdos entre países vecinos para contener la migración y luchar contra las mafias, y para crear un espacio amigable y de mutua colaboración. 

Son muchos los detalles que no aparecen en este resumen del aniversario, como los temas judiciales o la posición de Marruecos al respecto, pero que no escapan a la memoria de los ceutíes. Se ha gastado mucha tinta en este escabroso asunto. Importante es que España estuvo con Ceuta, la españolidad indiscutible de su pueblo se reforzó y esto vale su peso en oro.

Congratula saber que con el paso del tiempo la población ha superado el desánimo que sintió en aquellos fatales momentos por una vivencia tan sorprendente como inverosímil. Ceuta está ahora en paz.