CSIF ha insistido al Ministerio del Interior que promueva las medidas necesarias para evitar las agresiones que los funcionarios de prisiones continúan sufriendo en el interior de los centros penitenciarios. En un comunicado hecho público este viernes, apenas 48 horas después de un incidente en la prisión de Fuerte Mendizábal en el que resultó herido de consideración un funcionario, el sindicato reclama que se impulse la consideración de los trabajadores de Instituciones Penitenciarias como agentes de la autoridad, se les proporcione una formación adecuada y se les dote de medios coercitivos «modernos» para reducir los riesgos.
«Solo un dato, que no es sospechoso porque es oficial del Ministerio del Interior: en los últimos 8 años los funcionarios de prisiones sufrieron una agresión cada 32 horas, y en el último año cada 21 horas», argumenta el sindicato.
CSIF critica que, en el caso de Ceuta, el centro penitenciario de Fuerte Mendizábal continúa sin contar, cinco años después de su apertura, con personal suficiente. Además, el sindicato denuncia que la prisión no dispone de una relación de puestos de trabajo adecuada y continúa esperando su clasificación como centro de categoría «1.1», «la correcta para una infraestructura de estas dimensiones». Según explican los sindicalistas, la asignación de esta categoría permitiría una mejor separación interior y la apertura de un departamento específico para albergar presos peligrosos e inadaptados al régimen penitenciario.
