Alemania ha aprobado este viernes la legalización del matrimonio homosexual, un proyecto promovido por los socialdemócratas y apoyado por 393 diputados del pleno de Bundestag (Cámara Baja alemana).
El Partido Socialdemócrata (SPD), de la Izquierda, Los Verdes y miembros de la Unión Cristianodemócrata que lidera la canciller Angela Merkel, que dio libertad de voto para que se votara en conciencia, han dado el voto decisivo para la aprobación del matrimonio homosexual en el país germano. De esta manera, Alemania se convierte en el 24º país en legalizar estas uniones puesto que en algunos países de Europa como Italia, Austria, Grecia así como algunos países del este continúa siendo una prohibición.
Angela Merkel sorprendió al país al separarse un poco del rotundo "no" al que tenía acostumbrados a todos cuando se hablaba de esta ley. La canciller se mostró comprensiva y accedió al "voto de conciencia" dentro de su partido.
La canciller fue una de las primeras en depositar su voto en la urna colocada en el centro del salón de plenos y eligió la tarjeta azul, que hoy representaba el "no" a la legalización del matrimonio homosexual. El portavoz socialdemócrata, Thomas Oppermann, defendió el paso dado por su partido, que forzó que se debatiera la iniciativa antes de finalizar la legislativa rescatando un proyecto de ley de 2015 del estado federado de Renania-Palatinado que ya había pasado por el Bundesrat, la cámara alta, y que estaba aparcado en el Bundestag.
A pesar de que Merkel diera el brazo a torcer, tras depositar su voto ha declarado que "para mí, el matrimonio es, según nuestra Constitución, una unión entre un hombre y una mujer. Es por ello que he votado contra el proyecto ley". En total, 226 personas se han opuesto a esta legalización. Sin embargo, la canciller alemana ha confirmado que sí que ha cambiado de opinión respecto a la adopción de un niño por parte de dos personas del mismo sexo.
Los principales partidos que han defendido desde hace décadas la legalización del matrimonio homosexuall, Los Verdes y el partido de La Izquierda, han calificado este hecho de "histórico". Estos han perseguido siempre que la ley equipare los derechos de todos los ciudadanos al matrimonio, independientemente de cuál fuera su orientación sexual. Sin embargo, el partido conservador de la dirigente del país, Angela Merkel, siempre se había resistido a este aprobación.
