Granada se ha convertido en uno de los puntos calientes de la entrada de inmigrantes a la península. Tal es así que la provincia es la segunda mayor puerta (sin contar con las islas Canarias) a España para aquellos marroquíes que tratan de cruzar el Mediterráneo a bordo de una patera. Y es que, pese a que a nivel global baja la llegada de inmigrantes por mar al litoral granadino, el número de personas de origen marroquí que han sido trasladadas hasta el Puerto de Motril tras ser rescatados en una embarcación hasta finales de octubre aumentado en más de un 48% en comparación con el año anterior.
Según publica el diario Granada Hoy, pese a que podría pensarse que la relajación de restricciones por la pandemia vividas este año podría traducirse también en un mayor número de personas que tratan de llegar hasta la península a través de la línea Granada, lo cierto es que la inmigración ha sufrido una caída del 22%. Así se recoge según el último resumen de Eurosur de la Guardia Civil, en el que, además, se confirma un cambio de tendencia respecto a la procedencia -lugar de origen- de aquellos que han pasado a lo largo de estos diez meses por el Centro de Acogida Temporal de Extranjeros (CATE) de Motril.
