Una nueva tragedia ferroviaria ha vuelto a golpear este sábado a India. El país asiático, que ha sufrido más de 2.300 muertes en los cerca de 1.500 accidentes ferroviarios que se han registrado en la última década, vuelve a vestirse de luto tras el siniestro de este domingo en el norte del país, en el que al menos 96 personas han fallecido y otras 100 han resultado heridas. El balance no es definitivo, ya que los equipos de rescate siguen buscando cadáveres entre los vagones.
El accidente tuvo lugar durante la madrugada cuando catorce vagones del tren descarrilaron cerca de la localidad de Pukhrayan, en el estado de Uttar Pradesh, en el norte de la India. La mayoría de los pasajeros iban dormidos cuando se vieron sacudidos por un "golpe bestial y un ruido ensordecedor", según ha relatado un superviviente a una cadena de televisión india. El tren cubría el trayecto entre Patna e Indore, un recorrido de más de 1.000 kilómetros que une el noreste y el centro de India.
Por el momento se desconocen las causas del siniestro, mientras los equipos de rescate están empleando maquinaria pesada para rescatar a los pasajeros atrapados entre los vagones siniestrados.
La policía ha aclarado que hay 76 personas que se encuentran hospitalizadas, muchas de ellas en estado grave, aunque el número de heridos podría ser mucho mayor. El primer ministro indio, Narendra Modi, ha expresado su preocupación al conocer el accidente y ha asegurado estar en contacto con el ministro de Transporte, Suresh Prabhu, quien está siguiendo de cerca la situación.
La red ferroviaria india tiene 65.000 kilómetros de recorrido -es la cuarta más larga del mundo por detrás de Estados Unidos, Rusia y China- y cuenta con 12.500 trenes y transporta a diario a unos 23 millones de pasajeros.
India es un país que desgraciadamente suele verse cada poco tiempo sacudido por graves accidentes ferroviarios. La seguridad es aún una asignatura pendiente en el sistema ferroviario indio: en la última década se han producido 1.522 accidentes en los que han muerto 2.331 personas, según el Ministerio del Ferrocarril.
