El vicepresidente de la Asociación Gallega de Actividades Náuticas (AGAN), José Manuel Fernández, está esta semana en Ceuta pilotando un proyecto al que se ha adherido la Cámara de Comercio Local junto con entidades de otras 10 autonomías, la Red de Cruceros Costeros y Fluviales, que cuenta además con expandir sus dominios pronto a Portugal. “Están encantados con el proyecto, pero falta formalizarlo”, ha concretado sobre la adhesión de Portugal Fernández.
El proyecto busca canalizar un proyecto en red de oferta turística de pequeños cruceros en las costas y también en los ríos y embalses de prácticamente todo el país, para comercializarlos conjuntamente y para poner en marcha muchas rutas y paquetes turísticos nuevos. Entre ellos en el caso de Ceuta, como ha explicado la Cámara de Comercio, rutas de cruceros turísticos que unirían Ceuta con la Costa del Sol. Y aquí, Fernández lo tiene claro: “Ceuta es un enclave estratégico turísticamente para nosotros, no sólo en Andalucía, sino en todo el Mediterráneo. Tiene un interés estratégico para nosotros”.
A ese interés se suma además las enormes facilidades que ha dado la Cámara de Comercio, muy interesada en el proyecto, para acoger el evento y potenciar de paso el turismo de congresos por el que también viene apostando con fuerza tanto la Ciudad Autónoma como la propia Cámara y en el que hay depositadas grandes esperanzas.
Ese interés nuclear viene por la posición geográfica de la ciudad, puente entre dos continentes y entre el Mediterráneo y el Atlántico. Y por eso, la Red ha optado por celebrar su primer seminario y segundo encuentro, precisamente en Ceuta tras presentarse en la Ribeira Sacra (sur de Lugo y norte de Ourense en las confluencias entre el Miño y el Sil). De ahí la idea y el producto parecen poder exportarse con facilidad al resto del país.
La idea es la de ofertar como actividad turística pequeños cruceros, en barcos sostenibles de 12 o 15 metros de eslora y con menor aforo que los habituales rascacielos flotantes que vienen a la mente cuando cualquier piensa en la palabra crucero. Una actividad que es además complementada con otras, también acuáticas o no: caben visitas al patrimonio histórico y cultural o a las bodegas como han experimentado ya en Castilla La Mancha. “Gente que tenía una bodega y que en su vida había pensado en comprar un barco ofrece ahora un paquete de crucero por el río con visita a la bodega y les está funcionando”, ha explicado Fernández.
“Tenemos más de 800 agencias de viajes que han promocionado esta actividad inicialmente. Todo el mundo donde se ha presentado este tipo de producto les ha gustado. Es novedoso. Esto requiere un apoyo institucional. Y conseguir estar red a nivel nacional es importante”, ha explicado Fernández.
Parte del trabajo que se desarrolla en Ceuta estos días pasa precisamente por tratar de canalizar ayudas europeas a proyectos concretos. Generar herramientas que puedan servir a empresas para que se lancen a montar este producto, a nuevas rutas y ofertas. Tal sería el caso de Ceuta.
Y en ese sentido es importante la apuesta por el turismo sostenible y ecológico con huella cero de carbono como exige el respeto al medioambiente y los planes ya avanzados de la Unión Europea para limitar la contaminación. Fernández ve más fácil que una nueva empresa o una pequeña empresa como las que se requieren para esta actividad de charter de pequeñas dimensiones pueda apostar por motores eléctricos, que incluso se alimenten de paneles solares que no una gran empresa con grandes buques se reconvierta, “eso lleva más tiempo”. Y además es consciente de que en esa dirección “el mercado y la tecnología han dado un salto muy grande”.
Si menciona Portugal además de por sentido geográfico es porque sabe que “los portugueses en el Douro (El Duero) lo han clavado” y otros modelos a seguir son los de Francia en el canal de Midi.
