Desde que se conociera el contenido del auto del Juzgado de Instrucción número 5 de la ciudad por el que se hacía pública la apertura de juicio oral contra Torrado por la presunta comisión de un delito de prevaricación y otro de malversación de caudales públicos, el presidente comenzó una ronda de contactos para buscar un sustituto para el puesto, algo que le corresponde.
Los contactos mantenidos no sólo han sido con técnicos, sino también con consejeros de su equipo de gobierno e, incluso, con altos cargos del partido. Las reuniones se aceleraron durante el fin de semana, aunque el presidente desestimó la idea de hacer salir de su equipo de gobierno a ningún consejero para ahorrarse el tener que correr la lista.
De ahí, y todo antes de mantener la reunión definitiva con Torrado, Vivas pasó a barajar nombres de técnicos y de algunos cargos del partido, aunque es evidente que ninguno de los planteados ha sido de su plena satisfacción. Ante ello, el mandatario busca el candidato idóneo lejos de la frontera de Ceuta. La elección no es fácil, sobre todo por los problemas que en estos momentos amenazan al puerto ceutí. Una persona de talante negociador, con buena mano izquierda y recta en sus decisiones podría ajustarse al perfil que Vivas busca para la presidencia del Puerto de Ceuta.
