Hoy se reúne el consejo de administración de la Autoridad Portuaria para abordar la problemática del ruido surgida hace unos meses en relación al sonido que emiten los motores del ferry de Baleària que permanecen en marcha durante toda la noche y que impiden el sueño de los vecinos de las zonas cercanas.
Las barriadas afectadas, Junta Obras el Puerto, Sardinero y Estación de Ferrocarril, han llevado a cabo incluso una recogida de firmas, avalada por un informe de la propia Autoridad Portuaria en referencia a los altos niveles de contaminación acústica provocados por los motores del buque que permanecen encendidos desde que atraca el barco en torno a la una de la madrugada hasta que se marcha a las 6.00 horas. En total, cinco horas en las que los vecinos no disfrutan del silencio. Al parecer, los motores se mantienen en marcha por una mera cuestión económica.
El presidente de la Autoridad Portuaria, José Torrado, asegura que de al reunión saldrán las medidas que deberá tomar la naviera para garantizar el equilibrio entre el descanso de los vecinos y las cuentas de la compañía.
La lucha de estos vecinos tiene su antecedente el año pasado en Menorca, cuando un grupo de vecinos se organizó para echar al Passió per Formentera de sus noches y lo consiguieron.