Hablar por hablar, una de las grandes virtudes de la Consejería de Asuntos Sociales, emanada del propio gobierno del Partido Popular. Una actitud basada primero en él “si”, luego en el “estamos en ello” que finalmente acaba en un “no es posible'', probablemente sea por inacción o porque, como ellos dicen “no sea necesario en estos momentos”.
El tema en cuestión, que me indigna como ceutí y como persona ligada a un quehacer político para solucionar de lleno las situaciones y carencias de nuestra ciudad, es de qué forma la propia consejera de asuntos sociales trata la pobreza y exclusión social en nuestra ciudad. La ciudad autónoma de Ceuta, con 47,4%, se sitúa entre las localidades con mayor porcentaje en situación de pobreza y exclusión social, cifras récord en desigualdad y privación material severa. Actualmente, un total de 13.657.232 personas en nuestro país viven en riesgo de pobreza o exclusión social (29,2 % de la población), el segundo puesto en toda la UE en pobreza infantil y desigualdad. De este total, 3,2 millones viven en situación de pobreza severa, es decir, por debajo del umbral del 30% de la mediana de la renta.
Pero centrándonos en nuestra ciudad, campeona en exclusión social, una de cada cuatro familias sufre pobreza severa, situación que desencadena dificultades frecuentes para realizar los pagos de vivienda y suministros domésticos (como electricidad, gas o agua), así como el estado inadecuado de las viviendas y la incapacidad de afrontar esos gastos de acondicionamiento por falta de recursos económicos.
Si encima de todo esto se le suma la imposibilidad de numerosas familias del pago de los alquileres por no disponer de la ayuda que le correspondan por “colapso en los trámites” y viene la trágica consecuencia de desalojo de esa vivienda por imposibilidad de impago, la consejera no debe mirar hacia otro lado cuando hablamos de un albergue que sirva como alojamiento de urgencia porque, la labor de los hostales en nuestra ciudad, que puedo decir de primera mano que es encomiable, intentando siempre facilitar a las familias afectadas la estancia en ella (entre ellos está Eurodina, Entre dos Mares y otros) es la de velar también por el interés particular y disposición del sector turístico, no de la acomodación que la consejera de asuntos sociales se trae con ellos.
A pesar de las innumerables cifras que nos exponga a cada pleno de la asamblea, donde le cuestionamos la actuación de servicios sociales en esta materia (faltaría más que no hiciera lo encomendado), la realidad es esta y las solución no es seguir haciendo lo mismo que estos 15 años, debemos (porque es tarea de todas y todos y responsabilidad de la consejera) centrar nuestros esfuerzos en erradicar esta situación, por el bien de las y los ciudadanos, por el bien de Ceuta.
