Tenemos el honor de anunciarles la creación del Primer Consejo islámico en España. Un consejo en el que intervienen musulmanes de ascendencia española e hispanoamericana, así como personas de países de ascendencia musulmana, como son Marruecos y Siria.
Este consejo nace para paliar los efectos de una gran carencia, en lo que a la práctica y a los elementos más importantes de la doctrina islámica se refiere.
En efecto, el Islam, que durante XIII siglos ha sido el de mayor seguimiento, así como sus principios doctrinales, intelectuales y científicos, ha sido dejado de lado por la irrupción de doctrinas que, habiendo sido gestados por intereses políticos, económicos y estratégicos, han buscado la dominación intelectual sobre las masas musulmanas creando falsas doctrinas que sirven a una visión extremadamente “legalista”, ramplona y extremista de la religión, realizando una redada inquisitoria sobre todos los textos de clara índole filosófica y espiritual; creando por ello una visión materialista de la Religión, cuando ésta, por definición, sobrevive y es tal a causa de los elementos trascendentes que la otorgan su razón de ser.
La cantidad de obras emitidas por las imprentas de estos países (Arabia Saudita, Qatar, etc), de malísima calidad, de lenguaje brusco y ramplón, de consignas primitivas, discurso nada elegante, contenidos penosos, aberrantes a veces, se pasean por centros islámicos y mezquitas como una plaga de langostas. Todo ello espoleado, así como respaldado por grandísimas cantidades de dinero, procedente del oro negro y quién sabe de qué otros negocios.
Los musulmanes son adoctrinados en las redes sociales, en emisión masiva de videos de contenidos tendentes a extender esta visión esperpentizada del Islam, que por su simplicidad y primitivismo llega a cualquier persona, sea el que sea su nivel de formación
Los Hermanos musulmanes, cuya sede es Qatar, han establecido una serie de escuelas por toda Europa en las que se aprende un Islam de corte extremista, y al que se ha desprovisto de su humanidad, espíritu de paz y concordia y de sus creencias superiores; creando con ello una falsa Islam que podríamos tachar de feo, mercantilista y materialista.
Todo este panorama ha producido que las doctrinas auténticas del Islam, que se corresponden con las cuatro escuelas de Jurisprudencia (Malikita; Hanbalita; Hanifita; Shafiita) así como el Tasawwuf (Sufismo) y las otras dos escuelas de doctrina (Aqida) hayan quedado casi en el olvido, ya que sus representantes no tienen medios materiales para transmitir.
Por eso, el Consejo islámico Abu Madiam nace con la ambición saludable de hacer un trabajo de sanidad islámica, restableciendo la visión y el estudio del Islam, a lo que fue y a lo que realmente es: una fuente inagotable de conocimientos y significados, que son, a su vez, fuente de paz interior y exterior.
En cuanto a las funciones de este consejo, se trata por un lado, de otorgar consejos y fatuas a los/as musulmanes/as, y por otro lado de establecer un lazo cultural entre los musulmanes y el resto de la población, acometiendo acciones, eventos y proyectos conjuntos.
El Consejo está formado por un grupo de cinco personas, cuyo presidente es el sabio musulmán Salah Badr, una mujer (Zineb Badr) y tres miembros de la Comunidad Abu Madiam – Tariqa Alawiya al Gawziya, entre los cuales se encuentran el presidente (José Luis Mullor) y el secretario (Jesús Flores) de ACEDI. Junto a este equipo de cinco personas se encuentra una serie de asesores en cada materia (economía, medicina, arte, traducción, etc.).
Por otro lado, el Consejo islámico Abu Madiam, no solamente admitirá en su seno comunidades religiosas, sino cualquier tipo de asociación cultural y de fundación, al igual que de personas particulares, que se encuentran identificados por el proyecto.
Asimismo, el nuevo consejo tiene presencia en Hispanoamérica con la Comunidad islámica de Oaxaca y una serie de personas distribuidas por toda la geografía del continente.
