El Sindicato de Bomberos de la FeSP-UGT de Ceuta quiere denunciar por enésima vez la intolerable situación de inseguridad que sufrimos con las emboscadas que una y otra vez nos tienden en la barriada Príncipe Alfonso grupos de encapuchados que queman contenedores para apedrearnos.
Parece que la vida y la seguridad de un bombero no vale lo suficiente para que nuestras Autoridades se tomen en serio este problema y lo erradiquen de una vez. Al final tendremos que llegar a un bombero herido o algo peor para que comiencen las lamentaciones y se empiecen a adoptar soluciones contundentes por parte de los responsables de nuestra seguridad a la que como ciudadanos también tenemos derecho.
En la madrugada del pasado domingo al lunes, sobre las 4,30 de la madrugada nos vimos acorralados por un grupo de encapuchados mientras ardían contenedores en diversos puntos de la barriada, con una exigua presencia policial que también tuvo que huir del lugar mientras estos individuos que, como siempre lo tenían bien planificado, nos apedreaban de manera inmisericorde, con un grave riesgo para nuestra integridad física.
Estos gravísimos hechos que se repiten y han sido denunciados una y otra vez nos han hecho decir basta, y sabemos que no podemos dejar a unos vecinos indefensos ante un fuego que puede ocasionar nefastas consecuencias, pero tampoco podemos poner nuestra vida en riesgo ante la falta de medidas por parte de las autoridades para eliminar el problema de raíz..
El martes 24 de abril a las once de la mañana nos concentraremos todos los miembros del SEIS en el Parque de Bomberos, como primera medida de protesta ante la inacción de quien debe protegernos. Y seguiremos con otras medidas de protesta hasta no ver este problema solucionado.
Desde el Sindicato de Bomberos de la FeSP-UGT exigimos a la Delegación del Gobierno, competente en materia de orden público que se nos dé la protección suficiente para realizar nuestra labor de forma tranquila y eficaz y tampoco estaría de más que la fiscalía abriera una investigación sobre estos hechos delictivos, ya que entendemos que para su actuación no debe influir el código postal.
