El Hospital incorporó al psiquiatra Alfonso Poza Jiménez, especializado en la rama infanto-juvenil, en enero de 2018. Hoy no le interesa y el Ingesa deja sin atención, desde el 21 de septiembre, a más de medio centenar de niños y niñas que requieren tanto revisiones como primeras visitas.
Alfonso Poza Jiménez, que se formó en la especialidad de psiquiatría en el Instituto José Germain de Madrid (Leganés), es conocido por ser uno de los pioneros en los movimientos de desinstitucionalización psiquiátrica y ser un referente en salud mental comunitaria.
Peso a todo y padeciendo una pandemia de efectos impredecibles para la salud mental, Ingesa ha dejado que se marche al no corresponder a su propuesta de trabajar en la ciudad de martes a viernes haciendo las horas que fueran necesarias, pero no pasando consulta los lunes para poder visitar a su familia en Madrid los fines de semana.
A día de hoy, el Área de Salud Mental ubicada en el Centro de Salud de Otero sigue bajo mínimos con dos psicólogos y dos psiquiatras para adultos. Las citas se demoran sin que los profesionales tengan culpa y la Administración sanitaria no hace nada por solucionar el trabajo que se le acumula a los especialistas ni por que las revisiones se alarguen tanto en el tiempo.
