El Instituto de Gestión Sanitaria (Ingesa) ha hecho público este martes un comunicado en el que asegura que satisfacer las demandas de los médicos en huelga en Ceuta supondría un incremento medio de 3.000 euros al mesen las retribuciones de los facultativos. Ingesa ha difundido esta nota horas antes de la celebración de la concentración en defensa de la sanidad pública convocada en la Plaza de los Reyes por el Sindicato Médico de Ceuta, promotor de las movilizaciones.
La Administración sanitaria alude en su comunicado en exclusiva a las reivindicaciones económicas de los huelguistas. Según Ingesa, ese incremento de 3.000 euros beneficiaría a los médicos que compatibilizan la medicina pública con la privada, que hacen guardias y que son considerados personal de difícil cobertura.
Ingesa estima que estas reivindicaciones son las que están dificultando el acuerdo para poner fin a la huelga. Según detalla en su nota, la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) ha propuesto en la mesa de negociación incrementos anuales de 15.000 euros para los facultativos del grupo A1 como medida económica derivada de su consideración como personal cuyos puestos son de difícil cobertura.
Ingesa precisa que su intención es la de alcanzar un acuerdo con todas las organizaciones sindicales, además de con la CESM, en la Mesa Sectorial y recuerda que ya en este foro se propuso equiparar las cuantías de las guardias médicas a la media de retribuciones por dicho concepto en el Sistema Nacional de Salud.
Según la Administración, la ejecución de este acuerdo supondría un incremento mensual medio de 530 euros para aquellos facultativos que realizan guardias de presencia física (5 laborables y 1 festivo) o de localización (8 laborables y 2 festivos), todo ello en función del servicio y la programación de guardias.
Ingesa continúa desgranando los aspectos económicos de las demandas de los médicos y alude a una petición del CESM para incrementar el complemento de productividad variable hasta los 1.231,34 euros en concepto de complemento específico. Esta es la cuantía del complemento al que deben renunciar, por mandato legal, aquellos facultativos que compatibilizan su actividad en la sanidad pública con otra actividad privada, bien en consultas propias, bien en compañías privadas.
«Ingesa ha solicitado al órgano competente para su autorización la posibilidad de renunciar únicamente al 70% del complemento específico, haciendo extensiva esta solicitud para todas las categorías profesionales», detalla el comunicado.
