El contenido del dictamen, que ha sido adelantado por este periódico, desvela que con los recortes llevados a cabo en esta materia, el Gobierno, en la última legislatura, ha restado 2.865 millones de euros al sistema entre la supresión del nivel acordado de financiación, la reducción del nivel mínimo de aportación del Estado a las comunidades autónomas y la supresión de las cotizaciones de cuidadoras familiares que afrontaba la Seguridad Social.
Grande reconoció que en Ceuta “deberíamos mejorar en algunos servicios, aunque no estamos tan mal como nos ponen”. El director alega que la información del dictamen no es procedente de un órgano estatal ni acreditado, sino que es una asociación de directores los que hacen públicos estos datos”.
El responsable en Ceuta del Imserso no está de acuerdo con la puntuación, aunque reconoce que ha mejorado con respecto a la otorgada en otros períodos. Grande explica que la cartera de servicios se ha mejorado mucho en los últimos años, así como el tiempo medio de tramitación de los expedientes, que en el caso de Ceuta, asegura, es “de unos cuarenta días de media”.
“Las personas que están en el limbo, como ellos la denominan, de la dependencia, en Ceuta no existe”, dice Grande, que agrega que “todas las personas que han solicitado el reconocimiento al derecho de la dependencia se le ha reconocido, y, además, en unos plazos muy cortos”.
El director precisa que una persona que se acerca por las dependencias del Imserso en Ceuta “y solicita el derecho a la dependencia” éste se le otorga, en el caso que le corresponda, en “el plazo de cuarenta días”.
Actualmente en Ceuta son una mil personas las que cuentan con los servicios de dependencia otorgados, que van desde “una residencia, pasando por los centros de día, servicios de ayuda a domicilio, promoción de la autonomía personal, teleasistencia y prestaciones económicas vinculadas al servicio o para cuidadores no profesionales”, dice Grande.
La prestación que perciben los cuidadores no profesionales, que habitualmente son los familiares, oscila entre los doscientos y trecientos euros, aunque la cifra depende del grado de dependencia que tenga la persona y sus circunstancias económicas.
El director asegura que en Ceuta, la mayoría de las personas que reciben los servicios están acogidas al grado II, que es el moderado. Grado I y grado III, “las cifras suelen ser muy parejas”, concluye.
