El Poblado Marinero es una zona de la ciudad que cambia cuando llega la noche. Cientos de jóvenes se dan cita en este lugar para practicar el tan denunciado botellón.
Los negocios instalados en el Poblado están cansados de mandar quejas a la Administración local con la intención de que lo prohíban, pero de momento sólo han encontrado la "pasividad" por parte de las autoridades.
Este malestar ha ido a más cuando los afectados no sólo han encontrado basuras por todos lados sino parte de la infraestructura dañada, tal y como puede observarse en la imagen adjunta.
El administrador del Poblado Marinero, Piku Sunderdas, se pregunta "¿Hasta cuándo vamos a tener que aguantar esta situación?", y por qué todas las semanas la Ciudad incumple las ordenanzas municipales, "¿en mano de quién estamos?".
