Finalmente, solo se han observado barras en la calle en el Poblado Marinero. Los hosteleros no han querido problemas y han cedido a la prohibición de no instalar barras en la vía pública, siguiendo órdenes del Gobierno.
Esta mañana, algunos hosteleros han hecho oídos sordos y se han preparado como cada Nochebuena, sacando sus barras al aire libre. Sin embargo, la policía se ha encargado de hacer cumplir las normas y ha recorrido zona por zona retirando las barras que se iba encontrando. A mediodía parecía que algunos hosteleros iban a preferir pagar la multa que acabar con una tradición pero al final han dado marcha atrás y las han retirado.
Esto ha ocurrido en la plaza del Miró y en la del Dublín, donde ya por la tarde se podía ver a las personas disfrutando de la Tardebuena pero sin barras a su alrededor.
La prohibición la realizaba esta semana el Gobierno tras una petición realizada por el Centro Comercial Abierto. El consejero de Gobernación, Jacob Hachuel, aseguraba que la petición no era concreta y que se había realizado fuera de plazo. Además, Hachuel basaba su negativa en los informes realizados por la Policía Local, Protección Civil y Bomberos en los que se desaconsejaba la instalación de las barras como se lleva haciendo desde hace años.