La ruptura del ayuno es uno de los momentos más importantes para las familias musulmanas durante el Ramadán y como reza un dicho: “cada cual sabe cómo remover su harira”. Y al igual que en ese plato principal, con un receta muy particular que no suele faltar en un iftar que se precie, cada menú se plantea con lo que la economía de cada casa se puede permitir. Lo que no suele faltar en esas mesas es cariño, compartiendo lo que se tiene, aunque sean lanas de colores.
Un grupo de adolescentes que cursan 2º de la ESO en el IES ‘Clara Campoamor’ decidieron que un iftar durante las vacaciones fuera más especial, entre lanas y agujas; y en él no podía faltar su tutora, Verónica Rivera.
El grupo que ideó el iftar más crochetero de la historia reciente estaba formado por Dikra El Outmani, Yusef Hanane, Noor Mohamed, Suhaila Mohamed y Sumaya Mohamed y la cita, en Loma Colmenar.
A mesa puesta, y sin faltar un sólo detalle, la hospitalidad del matrimonio formado por Abdelkader y Samira, se respiraba en cada rincón de su hogar. Se habían dejado arrastrar por las locas ideas de sus gemelas, cediendo su espació más preciado, su salón, para que las clases de crochet que siguen en el instituto se trasladaran a su casa, con la complicidad de unos padres hacía sus hijas.
Las risas nerviosas de los primeros momentos dieron paso a la concentración que se precisa para intercalar los puntos deslizados con los altos, e intentar conseguir, no sin esfuerzo, hacer un anillo mágico.
Dikra, Noor, Suhaila y Sumaya son alumnas aventajadas con el ganchillo en la mano. Yusef se dispersa más, pero cuando se centra, teje como el que más. Supervisando que nada falte al grupo crochetero (al que se fueron sumando amigas y vecinas) están las hijas mayores de Samira y AbdelKader: Nora y Wasima.
La noche pasa en un suspiro y un proyecto (“Tejiendo Clara”) que nació en la mente, y las manos, de Verónica Rivera durante las restricciones en las aulas del pasado curso, se ha convertido en motor de la concentración, creatividad, técnica y paciencia de sus alumnos como una red de apoyo mutuo para no dejar caer en la desidia del abandono escolar a nadie.
Una “seño” diferente
La idea del iftar crochetero surge en el aula de 2ºF del ‘Clara Campoamor’ donde Verónica Rivera imparte clases de Lengua, respeto, compañerismo y otras formas de entender la enseñanza. Toda la implicación que muestra hacia su alumnado se refleja en el cariño de sus alumnos, que se despiden de ella -pasada la medianoche- con besos y abrazos, emplazándose a una cita de ‘crochet y referir’ antes de que empiecen las clases “a poder ser, seño”.
"Tejiendo Clara"
El proyecto educativo 'Tejiendo Clara: Convivencia, emociones e historias de vida a través del tejido en crochet' (coordinado por la profesora Verónica Rivera) se lleva a cabo en el IES Clara Campoamor desde el inicio del curso 2021/22.
Con este proyecto se pretenden alcanzar objetivos como concentrarse, aumentar la autoestima (ya que las labores en crochet ayudan a sentirse útil y bien con uno mismo); desarrollar la paciencia y la perseverancia; fomentar la creatividad activa; favorecer las relaciones intergeneracionales y las relaciones sociales (tejer siempre ha sido un acto con un fuerte componente social) y, finalmente, luchar por alcanzar los objetivos y a tolerar mejor la frustración (cuestión especialmente importante en la etapa de la adolescencia).
Un proyecto educativo que llevó a jóvenes, de todas las edades, en el IES Clara Campoamor a tejer por Ucrania, dentro del proyecto solidario de ámbito mundial #CROCHETFORUKRAINE
