Un vehículo de matrícula francesa ha sufrido este mediodía un espectacular accidente en la avenida Martínez Catena que se ha saldado, sin embargo, sin daños personales. El conductor del vehículo, un hombre de nacionalidad marroquí, ha confesado que se quedó dormido al volante.
El coche superó la valla del arcén y quedó incrustado entre ésta y la que protege la acera de la caída a la playa. Una dotación de bomberos acudió al lugar para proceder a la retirada del vehículo.