La Policía ha detenido a cuatro individuos como presuntos autores de los robos sufridos en sus domicilios por una madre y una hija en el plazo de tres días. Uno de los arrestados ha sido acusado de facilitar a sus compinches las llaves de la casa donde habitaba la mujer más joven, con la que le unía una relación de amistad, y de atracar él mismo a la madre de ésta.
Según la narración policial, el pasado 27 de mayo tres de los detenidos accedieron al piso de la amiga del cuarto implicado utilizando las llaves que éste les había proporcionado. Mientras se perpetraba el robo, la propietaria se encontraba en la playa de Calamocarro en compañía de su amigo, quien la había invitado a dar un paseo con la intención de alejarla de su domicilio.
Los asaltantes se llevaron consigo 500 euros en metálico, además de 18 relojes, 3 cámaras fotográficas y otras pertenencias personales.
Descubierto el asalto, la mujer telefoneó a su amigo, ahora detenido, para pedirle que le acompañase a su casa. En el lugar, y en presencia del hombre, la mujer le entregó a su madre una caja con dinero, que los ladrones no habían conseguido encontrar, para que la custodiara en su casa.
Dos días más tarde, el individuo irrumpía en casa de la madre de su amiga ocultando el rostro bajo un pasamontañas y esgrimiendo una pistola. El individuo se llevó por todo botín la caja que su hija le había confiado.
El hecho de que sólo el detenido y las dos mujeres conocieran la existencia de la caja puso a la Policía sobre la pista de los ladrones.
