UNA CEUTÍ NARRA LAS HORAS POSTERIORES AL ATENTADO

Desde Bruselas: “No podemos salir de la ciudad, la policía y el ejército están en la calle..."

Los terribles atentados que han castigado Bruselas este martes han conmocionado a la opinión pública mundial. Mamen de las Heras, una ceutí que viajaba por Bélgica en compañía de su hija de 14 años, debía desplazarse esta mañana hasta el aeropuerto de la capital para tomar un vuelo de vuelta a España. "Hay más precaución que miedo", explica la turista ceutí desde la capital belga. 

bruselas atentado
photo_camera Fotografía de una de las calles céntricas de Bruselas tomada a las 12.45 horas de hoy martes/ CEDIDA

“No podemos salir de la ciudad, la policía y el ejército están en la calle, los helicópteros sobrevuelan la zona, no es posible tomar ningún medio de transporte…”. Este relato de las horas posteriores al terrible atentado que hoy ha sacudido Bruselas es confiado a Ceuta Actualidad por Mamen de las Heras, una ceutí que esta misma mañana debía de haber tomado un vuelo en el aeropuerto Zaventem.

De las Heras había viajado a Bélgica el pasado sábado junto a su hija de 14 años y un grupo de otras cuatro personas para disfrutar de sus vacaciones de Semana Santa en el país.

“Lo teníamos todo preparado para tomar el avión de las tres y media, aunque llegamos a sopesar la posibilidad de sacar billete para un vuelo que partía a las nueve y media de la mañana –continúa la ceutí- Menos mal que no lo hicimos, porque nos habría pillado en el aeropuerto”.

La turista ceutí y su hija se encuentran hospedados en un hotel situado no muy lejos de la estación de metro de Maelbeek y de la calle Loi, donde los artificieros de la policía belga desactivaban en torno a mediodía un artefacto explosivo. “Esta misma mañana hemos estado comprando en una tienda que se encontraba allí mismo”, explica De las Heras.

Los turistas han recibido la recomendación de no abandonar los hoteles hasta que la situación se clarifique. “La gente es muy amable, los trabajadores del hotel nos orientan sobre qué debemos hacer: estamos a la espera. Hay más precaución que miedo”, concluye la ceutí.