Los agentes de aduanas marroquíes que trabajan en el paso de la frontera del Tarajal han impedido el contrabando de teléfonos inteligentes a bordo de un Citroën ligero conducido por un marroquí residente en Ceuta.
Una fuente de aduanas explicó a Hespress que la operación se llevó a cabo en la zona de entrada, donde los agentes de aduanas incautaron 270 teléfonos inteligentes, por un valor de unos 13.000 euros.
La misma fuente agregó que estos teléfonos fueron cuidadosamente escondidos entre las pertenencias personales del interesado, luego de que éste los colocara deliberadamente en bolsas destinadas a productos alimenticios. Concretamente, los teléfonos iban escondidos en cajas de leche. Una manera ingeniosa de pasar teléfonos de un país a otro que ha quedado frustrado por el buen trabajo de los agentes.
El conductor del vehículo fue remitido a personal de Seguridad Nacional para completar la investigación de este caso. confirmando que el sospechoso fue puesto bajo medidas de custodia, en cumplimiento de las instrucciones del Ministerio Público competente.
