El Pleno de la Asamblea ha activado este jueves la cuenta atrás para resolver cómo se gestionará la limpieza viaria y la recogida de basura de 2024 en adelante. Aunque los tiempos son tramposos, en general, pero especialmente aquí. El Pleno lo que ha aprobado es activar una comisión de estudio para dirimir cuál es el modelo de gestión más eficiente y óptimo sobre la gestión de este servicio esencial; y lo hará con un plazo máximo de 3 meses para llevar las conclusiones de nuevo al Pleno. Es decir, al filo de que el año expire. Esa Comisión de Estudio aprobada estará presidida por el consejero responsable del servicio: Fomento y Medio Ambiente, Alejandro Ramírez. Hará de secretaria una funcionara de su área y tendrá vocales con representación de todos los grupos y técnicos municipales variados para abordar las cuestiones jurídicas, económicas y propiamente técnicas del servicio. Sobre la mesa todos los datos para decidir si se apuesta por recuperar la gestión directa del servicio (municipalización) continuar con un contrato de servicio o apostar por una concesión administrativa. Una opción, esta última que en realidad el propio Ramírez ha descartado de forma pública en al menos dos ocasiones y que tiene como principal diferencia con el contrato de servicio que se puede adjudicar por un plazo mayor, hasta 25 años, y permite el traspaso entre empresas si hay visto bueno de la Administración.
La propuesta del Gobierno para estudiar formalmente cuál es el modelo de gestión más eficiente ha salido adelante por unanimidad, pero no sin debate con mar de fondo. Ramírez se ha limitado a repasar la propuesta y fijar cuál es su objetivo, recabar información y concretar por ejemplo “el proyecto técnico, medios personales, materiales, tecnológicos, organizativos que deberían ser empleados para satisfacer las necesidades ciudadanas” siempre acorde a las “capacidades financieras” de la Ciudad.
Pero en los turnos de réplica, el resto de portavoces han aprovechado para tirar de las orejas al Ejecutivo y señalando de forma directa al presidente de la Ciudad, Juan Vivas, como responsable último de que la ciudad esté sucia. Cada cuál lo ha hecho a su modo, eso sí.
El portavoz socialista tenía intención de no intervenir en un debate que le afecta de forma directa, es trabajador del servicio. Pero ha tenido que defenderse de la acusación lanzada por el portavoz de VOX, Juan Sergio Redondo.
Redondo ha reivindicado que tenía razón, aludiendo a las dos veces que su grupo planteó la municipalización del servicio con el paso previo de una comisión de estudio durante la pasada legislatura. Y puso de ejemplo, para darse la razón a sí mismo, lo sucedido con los autobuses, cuando llevaron hasta en tres ocasiones la municipalización, otras tantas rechazada: “Por el Grupo Popular y el resto de los grupos, apelando a ese supuesto cordón sanitario antidemocrático contra VOX”, ha resumido Redondo.
Redondo, que también cree que la ciudad está “bastante sucia” y el servicio atraviesa por “una situación crítica”, ha acusado al PSOE de ser “el brazo político de la empresa en la Asamblea”. Según su relato Gutiérrez y los suyos usan la representación que le han otorgado los ceutíes en el Pleno para defender los intereses de Trace.
Obviamente, eso ha hecho que el líder socialista interviniera de forma breve y se saltara su intención de no intervenir, precisamente por ser afectado personal de lo que se decida. “Pero el señor Redondo ha hecho una acusación bastante grave a este grupo. Nos acusa y habla de intereses. Yo le invito a que usted aclare aquí públicamente qué tipo de intereses tiene el Grupo Parlamentario Socialista con al empresa. Sea valiente y dígalo aquí porque le aseguro que usted va al juzgado. Aquí el único interés que tiene este grupo es el de Ceuta y los ceutíes, de todos y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas que viene en esta ciudad. Pero de todos, no sólo de la mitad, como vosotros, que sois unos racistas”, le ha espetado Gutiérrez a Redondo.
Redondo no se ha arredrado, pero ha matizado, rebajando tal vez, la acusación y aludiendo a las “fotos de operarios de Trace, publicadas por todos los medios, votando a los líderes que llevan el control del partido. Si no hay una intervención directa para elegir a los representantes del PSOE…” ha dicho.
Hamed: "Algunos se han lucrado por omisión y otros han sido perjudicados"
Más allá de ese rifirrafe paralelo entre VOX y el PSOE, los dos grupos localistas sí han deslizado críticas más de fondo sobre el servicio. La líder del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía de Ceuta (MDyC), Fatima Hamed, ha comenzado por echar en “falta” una cronología, que ha pasado a hacer ella misma. Así ha repasado que el servicio se adjudicó por 10 años y unos 150 millones de euros en marzo de 2013, lo que en puridad hubiera dado plazo al Gobierno hasta 2025 para resolver el nuevo camino, pero la empresa con la que ha habido todo tipo de polémicas durante estos diez años, anunció a principios de este año que renunciaba a la prórroga, lo que ha dejado a la Ciudad en una situación en la que ha obligado a la empresa a seguir prestando el servicio, pero eso conlleva que es ahora la empresa la que decide el precio. De ahí que ya en los propios presupuestos se ampliara la partida hasta los 22 millones de euros, desde los 19 por los que iba y que recientemente una modificación de crédito elevara ese coste aún más, a más a 25 millones, aunque Hamed en todo momento ha hablado de 22 millones.
Y eso con los anuncios “a bombo y platillo” realizados por el Gobierno durante el pasado año de que “se trabajaba en la elaboración de pliegos nuevos, que no han visto la luz”.
“Un contrato que es el más importante de los que gestiona la Ciudad y que ha ido creciendo y haciéndose una bola de nieve. Algunos se han lucrado por omisión y otros han sido perjudicados, los vecinos de los barrios en los que la suciedad ha ido creciendo de forma proporcional a como crecía el coste del servicio”, ha repasado Hamed.
Hamed ha repasado sentencias en contra, como la que sirvió para que Valderrama declarara que “el 90 por ciento de lo que se paga es mano de obra, si controlas el personal tienes controlado la totalidad de la ejecución del contrato”, ha citado la líder de MDyC a Juan Manuel Sánchez Valderrama, director gerente de Acemsa y máximo responsable de velar por el contrato.
“No habrá contrato en un año, si no se ha saldado a licitación, a menos de 5 meses no se va a hacer”, ha vaticinado Hamed, para señalar que se llega tarde. Para añadir que la decisión política de no recurrir sentencias judiciales ha hecho que se acabe “pagando lejía a millones de euros”. La Comisión, cree Hamed, “que debería haberse hecho hace tiempo. Sí exigimos que mientras se estudia, baje la suciedad de forma progresiva”.
Ramírez: "La decisión no está tomada"
Ramírez ha centrado sus respuestas en contestar a los grupos localistas, pero ha aclarado que la situación entre lo que sucedió con el Bus y lo que hay ahora no soporta comparación. La primera empresa estaba en quiebra tras el cierre de la frontera y lo que había en juego es que el servicio siguiera existiendo.
Ha recordado que “la maquinaria” está “totalmente amortizada. La Ciudad ha adquirido el cien por cien de la maquinaria nueva. Y construye una base para quedársela en propiedad. Y a partir de ahí hay que tomar una decisión”.
Una decisión, que ha hechos especial hincapié en recordar, no está tomada. Se tomará a la luz que arrojen los diversos informes que tiene que recabar ahora la Comisión de Estudio aprobada. El portavoz de Ceuta Ya!, Mohamed Mustafa, había señalado a Juan Vivas como el máximo responsable político de que la ciudad esté sucia. Y lo ha hecho con especial contundencia.
Mustafa: "Tenemos la ciudad más sucia de España, al precio más caro de España"
“Siempre hemos sido partidarios de la municipalización. También les amenazamos públicamente con llevarles a la Justicia, decae hoy esa amenaza con la creación de esta Comisión. El responsable político es el presidente de la Ciudad. No desde 2013, sino cuando llega a la Asamblea y todo lo que supone su momento de llegar. Hace pocos días pregonaron en Madrid la igualdad de todos los españoles. Ya me dirán qué igualdad hay entre vecinos que reciben el servicio de limpieza y otros que no lo reciben, siendo un servicio esencial, están fuera del pliego”, ha dicho para recordar que en El Príncipe ni se contempla la limpieza viaria de sus calles.
“Hay que reconocer, y nadie lo duda, que tenemos la ciudad más sucia de España, al precio más caro de España”, ha cerrado.
“Ni somos la ciudad más sucia de España”, la ha replicado Ramírez, negando la responsabilidad política a la que en cierto modo también había aludido Hamed y de modo directo lo había hecho Mustafa.
“Me deja estupefacta por decir que no está tan sucia, más o menos limpia o igual que otras ciudades”, ha replicado Hamed a Ramírez. Hamed ha reprochado el pecado original de los pliegos de 2013, la subida al máximo legal del 10 por ciento del contrato casi acto seguido, que se pagara en la primera década de los 2000 miles de euros para recibir la ‘Escoba de plata’ o que no se haya hecho nada en este tiempo a sabiendas que en febrero de 2023 se acababa el contrato, y ahora haya que pagar mucho más porque “a estas arcas municipales no les queda más que pagar lo que facture la empresa (…) 22 millones de euros por tener una de las ciudades más sucias de toda España. Si no hay ningún tipo de responsabilidad política no sé qué hacemos aquí”.
Mustafa le ha recordado que durante más de 2 décadas, ha sido el PP quien ha trazado las políticas públicas y las condiciones de vida de los ceutíes, “por tanto, decir que su jefe y ustedes son responsables políticos, no es que sea algo tremendamente inteligente, es algo de cajón”. Y ha instado al consejero a preguntarle a Vivas cómo llegó y cómo se ha cambiado el contrato hasta llegar a pagar por el servicio 2 millones de euros mensuales. “Si le parece barato, a mí no”, le ha apostillado.
“No se vanaglorien, pidan disculpas y digan que van a hacer lo mejora para Ceuta”, le ha pedido tras afirmar que la situación se tornó en insostenible sólo cuando la suciedad llegó al centro, porque a nadie le importó que los barrios presentaran un aspecto de suciedad.
“Nadie ha sacado pecho. Todo lo contrario. Hemos reconocido públicamente, el presidente lo ha hecho, que los servicios no están como deben estar”, ha replicado Ramírez.
