El túnel que conecta la Ribera con la plaza de África no parece el lugar más apropiado de paso. Este año es además utilizado como salida obligatoria por las normas covid impuestas por Sanidad. Abandonar la zona de baño antes de las ocho de la tarde supone atravesar este camino angosto y poco iluminado que produce intranquilidad por sus metros de longitud y sus recovecos, idóneos como escondite para quien se lo proponga.
Es cierto que a la entrada y a la salida del túnel, los bañistas pueden encontrarse con los trabajadores de Amgevicesa, pero estos son únicamente orientadores que indican cuál es el sentido de su uso durante esta temporada de baño.
Usuarios de la playa no se sienten tranquilos y más tras los acontecimientos del pasado 17 y 18 de mayo cuando miles de personas, muchas de las cuales viven en malas condiciones en las calles, cruzaron a Ceuta.