La Guardia Civil ha desmantelado una organización criminal dedicada a extorsionaba a personas que habían establecido contactos con mujeres a través de la red con propósitos sexuales. La «Operación Quilombeda» ha permitido la detención e investigación de nueve personas afincadas en Valencia, Cantabria y Valladolid.
Los agentes han identificado a 32 víctimas y han cuantificado el dinero estafado en los 40.000 euros.
La operación arrancó en marzo del pasado año tras la presentación de una denuncia ante la Guardia Civil. La víctima aseguró que había solicitado contactos con mujeres a través de internet y que, apenas unos días después, recibió amenazas por mensajería móvil exigiéndole dinero a cambio de no enviarle a su domicilio un sicario.
En dichas amenazas se le insinuaba que si no satisfacía el pago le propinarían una paliza o, incluso, podrían llegar a asesinarlo.
El denunciante acabó haciendo transferencias a sus extorsionadores por un importe de 12.000 euros.
Timo del sicario
Los delincuentes ejecutaban las estafas bajo el método conocido como «el timo del sicario», un chantaje que se inicia con la introducción de anuncios falsos en páginas web dedicadas a contratar servicios de contactos con mujeres. Una vez que la víctima contrata este tipo de servicios reciben mediante mensajes o incluso llamadas telefónicas amenazas de muerte de un supuesto sicario que reclama el pago dde una suma de dinero para evitar ser asesinado o herido.
Cuando se hacen con el dinero estafado lo redirigen a cuentas bancarias propias o compran cuentas a terceras personas vulnerables bajo comisiones o engaño previo.
Ofertas de trabajo
Los detenidos e investigados también se dedicaban a ofrecer falsas ofertas de trabajo a través de internet y las redes sociales. Sus víctimas interactuaban con ellos a través de llamadas telefónicas y mensajes. Tras alcanzar un supuesto acuerdo, sus víctimas remitían copia de sus documentos personales como el DNI y números de cuentas bancarias.
Ya con la documentación en su poder, los miembros de la organización daban de alta servicios de telefonía y cuentas bancarias, todo ello con los documentos de sus víctimas que se interesaron por los anuncios de empleo.
Como resultado de la operación, se ha detenido e investigado a siete personas en Valencia. En una segunda fase de la operación también se ha investigado a otros dos integrantes de la organización en Cantabria y Valladolid.
A los presuntos autores de los hechos se les atribuye los supuestos delitos de extorsión, amenazas, estafa, suplantación de identidades, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal.
