“No fue una decisión política”. El consejero de Sanidad, Javier Guerrero, ha negado que su voto en el Consejo Interterritorial de Salud, reunido el pasado miércoles, estuviera influido por consideraciones políticas.
En el transcurso de una rueda de prensa ofrecida hoy, Guerrero ha insistido en que el rechazo a los planteamientos del Ministerio es el resultado de la valoración técnica de la propuesta. Los consejeros de Sanidad del PP en Ceuta, Andalucía, Madrid y Galicia y el representante de Cataluña fueron los únicos en emitir un voto contrario. La propuesta establece, entre otros baremos, los 500 contagios por cada 100.000 habitantes en catorce días como el límite a partir del cual es necesario tomar medidas de confinamiento en las grandes ciudades.
Guerrero ha subrayado que, además de considerar que los parámetros aprobados por el Consejo no se compadecen con la realidad sanitaria ceutí, la propuesta no podía aceptarse por el modo cómo se ha elaborado. El consejero ha criticado que el Ministerio remitió el documento a la Ciudad sin tiempo para su estudio y sin aval técnico. “No sabemos por qué este borrador ha ido del Ministerio de Sanidad a los técnicos y no al contrario”, ha criticado.
Críticas a Hernández
Guerrero ha desmentido al secretario general del PSOE ceutí, Manuel Hernández, quien acusó ayer al PP de coordinar a sus consejeros de Sanidad para que votasen en contra como parte de una “estrategia” diseñada para atacar al Gobierno central.
“Hernández no tiene ni idea de lo que habla –ha replicado el consejero- En estas cosas, la política ha de quedar a un lado”.
El responsable de Sanidad ha insistido en que no resulta aceptable establecer un criterio común para todo el país a la hora de caracterizar la evolución de la pandemia en los distintos territorios.
Guerrero también ha negado la participación de dirigentes del PP en la videoconferencia que previamente a la celebración del Consejo Interterritorial mantuvieron los consejeros de Sanidad de los gobiernos autonómicos gestionados por los populares. “De ahí no salió ninguna directriz”, ha subrayado.
Todas las comunidades del PP votaron contra la medida, excepción hecha de Castilla-León y Murcia. La consejera castellano-leonesa es miembro de Ciudadanos, partido con el que los populares mantienen un acuerdo de gobierno en la autonomía. El Gobierno de Murcia, que se abstuvo, aseguró que posteriormente que su voto, en realidad, fue contrario a la propuesta.
