Las obras que se ejecutan en la Plaza de África en el marco del proyecto de reforma de la Gran Vía y sus inmediaciones han deparado esta semana una sorpresa a los operarios. Mientras trasplantaba el ejemplar de chorisia en la Plaza, los trabajadores advirtieron la presencia de unos restos arqueológicos que Patrimonio ha datado en el Bajo Imperio Romano.
Los trabajos han sacado a la luz el resto de un muro de la época que, tras ser inspeccionado, se ha protegido y cubierto. Además se hallaron piezas de cerámica y moluscos que han sido trasladados al Museo.
Las obras no se verán afectadas por el hallazgo.