La asociación Miradas ha vuelto a sacar la fotografía a la calle. El Paseo del Revellín se ha convertido durante toda la jornada en una improvisada sala de exposiciones donde profesionales y aficionados ha colgado su obra a la vista de los viandantes.
La proliferación de aficionados al mundo de la fotografía ha provocado que asociaciones como "Miradas" se sumen a iniciativas como "Pon una foto en la calle", un proyecto socio-cultural que nació tras la redacción del Manifiesto Homo Ars en 2008, con la intención de facilitar la accesibilidad al arte de toda la sociedad.