La frontera de antes y la que quiere Vivas: 27.000 personas menos que no saturan los servicios públicos

El presidente ha manifestado que la frontera, desde su reapertura, está funcionando mejor al no aplicarse la excepción a Schengen. Juan Vivas traduce en beneficios para Ceuta la reducción en los flujos de personas: "aliviar la presión migratoria irregular, luchar contra la economía sumergida, mejora de servicios como el sanitario o educativo".

 

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photo_camera Control de la Guardia Civil en la frontera. (C.A)

Poner fin a la excepción al acervo Schengen y aduana comercial. Son las dos premisas básicas y necesarias que protagonizan la campaña emprendida hace meses por el Gobierno de la Ciudad, con el presidente a la cabeza, para marcar el nuevo escenario fronterizo. Así lo ha vuelto a reiterar este lunes el jefe del ejecutivo que, en esta ocasión, se ha remitido a los hechos para amparar su argumentario.

 “La experiencia nos demuestra cómo está funcionando ahora la frontera, que no se está aplicando la excepción- es decir se requiere visado para todo ciudadano no perteneciente al entorno de la UE, incluidos los residentes en la región de Tetuán-, y cómo funcionaba antes”, ha arrancado el presidente para remitirse a las cifras. “Antes se estimaba que pasaban unas 30000 personas diarias, ahora hablamos de 3000”.

27.000 personas menos transitan por la frontera que aspira Vivas a que se asiente definitivamente, y que en opinión del jefe del Ejecutivo el resultado de esa reducción de los flujos tan solo tiene resultados positivos para Ceuta. “Repercute de manera positiva en los controles, en aliviar la presión migratoria irregular, a la hora de luchar contra la economía sumergida, en un impacto positivo en servicios esenciales como la asistencia hospitalaria, Educación, Área de Menores o Servicios Sociales.  Ese debe ser el camino”.

En cuanto a la Aduana, según el presidente se plantea la cuestión tanto en el plano jurídico como el concerniente a las infraestructuras. El primer caso, para Vivas, obedece a un trámite más raudo, siempre que Marruecos colabore al pronunciarse a favor de ello. Por su parte, en cuanto a medios e infraestructuras, el presidente ha reconocido que se carece de ello, pero se puede resolver una vez resuelto el asunto primigenio.