Los pases en embarcaciones náuticas o a nado de marroquíes hacia Ceuta han sido constantes durante este verano. Un goteo de entradas de marroquíes que bordean el perímetro fronterizo que mantiene a las fuerzas del orden siempre vigilantes.
Los espigones tanto de la playa del Tarajal como de Benzú ha sido una zona de paso habitual para esos pases a nado. Las zonas están muy controladas por la Guardia Civil y la Policía Nacional que, de forma más habitual de lo que trasciende, intercepta a los migrantes.
Pero una vez realizados los trámites pertinentes, ¿qué pasa con esas personas que han cruzado de forma ilegal la frontera?. Lo habitual es que se proceda a su devolución en el paso fronterizo, pero, según informan fuentes de la Delegación del Gobierno, "Marruecos rechaza de forma sistemática a sus nacionales, esgrimiendo argumento que se basan, sobre todo, en temas sanitarios relacionados con lo pandemia".
Desde la falta de información sobre la vacunación hasta si han pasado o no la enfermedad suele ser el motivo por el que la policía marroquí rechaza la devolución de sus nacionales en la frontera.
Pero ¿qué va a pasar a partir de ahora, cuando las autoridades marroquíes ya han levantado las restricciones sanitarias de entrada al país por vía aérea y son menos estrictos en el control de pasaportes sanitarios y otras medidas, como la de portar una PCR, de los residentes ceutíes que cruzan a Marruecos? Está por ver.
Desde el viernes 30 de septiembre, Marruecos levantó las restricciones sanitarias de entrada al país por vía aérea y en el paso del Tarajal los ceutíes que cruzan la frontera de forma habitual aseguran que "Marruecos ya no están pidiendo ni el pasaporte de vacunación ni una PCR", aunque otros viajeros afirman que sí les ha pedido la documentación sanitaria y desde la Delegación de Gobierno aseguran que no les consta que se haya modificado la norma en Marruecos.
Las mismas fuentes de la Delegación aseguran, en el tema de las devoluciones, que desde la crisis de mayo "Marruecos sólo ha aceptado a 62 de sus nacionales".
Otros argumentos para que la policía marroquí rechace en la frontera la devolución de sus naciones es la falta de documentación.
