Más de medio año suman las concentraciones semanales de los transfronterizos en la plaza de los Reyes. De pedir la reapertura de la frontera o un pasillo para poder ir a Marruecos y regresar a Ceuta, sus reivindicaciones se asentaron en pedir una solución a la situación "excepcional" en la que se encuentra en Ceuta que planea un limbo legal.
Ahora, al fin, con el anuncio oficial de esa tan deseada reapertura, lo que hubiera sido un mar de felicidad, ha virado en dudas y enfado. La delegada del Gobierno ha faltado a su palabra, la ha acusado el colectivo este lunes. "Nos prometió mil veces que seríamos los primeros, pero ahora tenemos que esperar al 31".
No es su único descontento. Las condiciones que con pinceladas se han esbozado para estos trabajadores, también están impregnadas de críticas e interrogantes, muchos. Se quejan que con los permisos de trabajo vencidos o con fechas próximas a ello, deben esperar dos meses hasta su renovación.
