Un total de 340 inmigrantes, la mayoría de ellos subsaharianos, ha conseguido entrar ilegalmente en Ceuta durante los meses de verano, según informa la agencia Efe. La mayor parte de estas personas lo lograron escondidas en dobles fondos de vehículos preparados por redes de inmigración ilegal.
Según los datos de la Cruz Roja Española, desde el pasado día 1 de junio hasta la pasada semana se ha contabilizado la entrada clandestina de 340 inmigrantes, de los que la mayoría procedían de diferentes países del África Subsahariana, principalmente de Guinea Conakry o la República de Guinea.
El resto de los inmigrantes fueron identificados como nacionales de Argelia, Siria, Marruecos y Omán. También se han censado en este periodo a 11 mujeres -todas ellas subsaharianas y una de ellas embarazada-, y 13 menores.
El mayor porcentaje de entradas se ha producido escondidos en dobles fondos de vehículos especialmente preparados en talleres clandestinos de Marruecos para cruzar la frontera del Tarajal.
Estos inmigrantes son posteriormente abandonados en distintas zonas de Ceuta -hasta más de sesenta lugares diferentes- para que la policía no los relacione con un patrón determinado.
Preferentemente, los inmigrantes suelen aparecer en las inmediaciones del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) o en la Jefatura Superior de la Policía Nacional.
Las más de 300 entradas en estos meses veraniegos han provocado que el CETI haya estado en los últimos meses por encima de su capacidad -512 plazas- y que en estos momentos el recinto tenga censados a unos 750 inmigrantes.
