"Los clientes se van y nosotros sin trabajar". Este es el lamento de uno de los comerciantes de la barriada de Hadú que, como es habitual, es una de las afectadas cuando hay una interrupción en el suministro eléctrico. Y hoy ha sido en pleno horario comercial, sobre las doce menos cuarto de la mañana y se ha prolongado durante unos 35 minutos.
El mercado de San José, la zona comercial de Hadú, el mercado del Mixto han visto como sus clientes se han ido marchando porque sus básculas con eléctricas así como los pagos porque, con el corte del suministro eléctrico, los servicios de internet caen también.
Los vecinos del campo exterior pasan del enfado a la resignación con cada apagón porque sus quejas caen en saco roto. Quienes han de escucharles, el Gobierno, anuncia las aperturas de expedientes informativos que, en la gran mayoría de los casos, quedan archivado en un cajón porque nadie vuelve a escuchar hablar de ellos, salvo en las contadas ocasiones en las que la ciudad ha sufrido un 'Cero Absoluto'.
Las barriadas que se ven afectadas por los reiterados apagones son las del campo exterior. Los grupos del Rocío, el Mixto, Zurrón, Hadú, los Rosales, el Pantano, Benítez hasta llegar al Príncipe y Benzú, y los vecinos se preguntan por el motivo de ser ellos los que sufren siempre las consecuencias.
